Beso a discreción

8 Dystopia

Han pasado casi seis días desde la tragedia de Trost y por suerte las pesadillas son menos recurrentes.

Dicen que después de una tormenta siempre sale el sol. Y bajo esa analogía podemos decir que '' si existe un pequeño rayito de luz''

Un misterioso titán aliado recupero el Distrito Trost,

Pero hay mucho que hacer. Hay escombros por todos lados, casas y negocios en ruinas y dejando de lado la perdida de bienes materiales...La perdida de vidas humanas, tanto civiles como de las cuatro ramas del ejército, otro golpe bajo.

Pero muy a nuestro pesar, no nos podemos dar el lujo de esperar a que el tiempo por si solo ponga las cosas en su lugar.

Los Viatorem nos reunimos con las tropas de guarnición para ayudar en lo posible. Ya fuera recuperando cadáveres, levantando restos u otras tareas que fueran surgiendo.

-Hola, Athena... ¿me regalas un minuto?

- ¡Petra! ¡Que gusto verte! – Deje la cubeta con escombros en un rincón para saludar a mi amiga – Capitán Gustav, solicito permiso para un descanso.

-Adelante.

-Gracias, señor

-Veo que trabajas duro- Petra y yo comenzamos a caminar por la calle y nos sentamos en lo que quedaba de una banqueta- Tienes las manos muy lastimadas.

-Entre más rápido regresemos a la normalidad, mejor. Por cierto, ayer fui a la base y no los encontré – tomamos un poco de agua fresca de su cantimplora a la sombra de un edificio derrumbado.

-Lo siento, tuvimos un asunto de emergencia que atender

- Aaah ¿Sobre el juicio del niño titán?

- Así es.

- Dicen que él está de nuestro lado y que es un experimento del ejército pero ¿Qué tan confiable es en realidad?

-No tengo permitido revelar mucha información. Lo único que puedo decirte es que es un chico recién graduado de la clase 104 y su nombre es Eren Jaeger. Si es o no es confiable se sabrá dentro de un mes.

-oooh, valla ¿Y crees que existan más titanes como él?

-Puede ser. Pero no vine a hablar de eso.

-okey... y ¿en qué te puedo ayudar?

-¿Recuerdas nuestra última conversación?

–escarbe entre mis recuerdos- ah, si... era sobre el Capitán.

-¿Sabes cuál fue su primera orden al llegar a Trost?

-No, ni idea

-Ubicarte y ponerte a salvo... Tú sabes que te apreciamos y obviamente no hubo objeciones de nuestra parte... pero yo...quiero saber que sientes por él.

-¿Hablas del Capitán Levi?

-Se honesta conmigo, por favor- Percibí un toque de amargura en sus palabras y era obvio por donde iba la cosa

-bueno... yo... siendo totalmente sincera... creo que me hace sentir atraída...aunque tampoco puedo decir que es amor.

-Pues yo si lo amo, Athena.- Sus mejillas se sonrojaron-Para mí él es más que simple atracción. Mi amor por el nacio desde la admiración y el respeto por su profesionalismo y fuerza.
Escucha... tu... tu puedes tener al hombre que quieras, pero para mí existe nadie más que él –sus bonitos ojos ámbar se empañaron.

- Quieres que me aparte del camino. ¿Correcto?

-Si. Eso es lo que quiero.

-No te preocupes. Yo... no seré un obstáculo para ti, pero por favor no me pidas que me aleje... después de todo lo considero un amigo.