No es un sueño.

Hablemos.

La tensión era palpable en esa casa. Con miradas fulminantes del padre de SeokJin para su esposa, hijo y... el novio de su hijo.

- Oh NamJoon, ¿Estas bien? ¿no te duele el golpe? Estaba tan alterada que no me acordé que el cavernícola de mi marido te había golpeado.- Dijo la señora Kim, mirando mal a su marido aún molesta por lo que había hecho.

- No se preocupe, estoy bien. A decir verdad, su esposo no golpea tan fuerte... tal vez es la edad.- Contestó NamJoon, mirando con una risita a su suegro por lo último que dijo.

- Tienes razón cariño, a los pasos de los años uno se va debilitando, los huesos pierden calcio y nos volvemos más lentos.-

- ¡¿A quien le están diciendo viejo?! ¡Yo apenas estoy en mis treintas!.- Exclamó el padre de SeokJin, ya molesto por lo que decían de el como si el no estuviera presente.

- Tranquilo, no te tomaste tus pastillas, no debes de hacer corajes acuérdate de lo que te dijo la doctora.- Le dijo su esposa.

- De acuerdo. Pero... hablemos.-

- ¿Mh? ¿De que quieres hablar?.-

- De... ellos. ¡No van a conseguir mi aprobación tan fácilmente! ¡Es más! Me voy a quedar una semana más para ponerlos a prueba.- 

- ¿Quien diablos eres tu para poner a prueba el amor que ellos se tienen, eh? ¿No lo dejé muy claro ya hace rato?.-

- A menos que ellos dos quieran seguir siendo lo que sea que sean ahora, van a tener que buscar mi aprobación. O de lo contrario puedo mandar muy lejos a SeokJin, muy lejos.- Y con aquella sentencia, toda la casa quedó en completo silencio. Después de unos eternos minutos, NamJoon junto con SeokJin se decidieron a hablar.

- Esta bien, buscaremos y tendremos su aprobación en nuestra relación.- Dijo NamJoon.

- Así es papá.-

- Le mostraré que mi amor por SeokJin va más allá que un simple noviazgo de adolescentes, yo a el lo quiero para toda mi vida.- Después de que NamJoon terminará de hablar, se escuchó un chillidito de emoción de parte de la madre de SeokJin.

- ¡Que tiernooos!. Por mi, su relación esta más que aprobada.- El señor Kim miró a su esposa para después suspirar.

- Veremos si lo que dices es cierto, NamJoon.-

- Yo nunca digo algo de lo que me pueda arrepentir, suegro.- La palabra "suegro" hizo que la sangre del señor Kim hirviera de puro coraje ¡¿Cómo se atreve a decirle así?!. La señora Kim vio como una venita saltaba en el cuello de su esposo y supo que se estaba enojando, así que decidió cambiar el tema.

- Así que... ¿Pronto seremos abuelos, eh?.- Le pregunto la mujer a el mayor de sus hijos, quien lleno de orgullo asintió.

- ¡Tu! ¡Deberías de buscar un trabajo estable y buscar una casa para poder darle un mejor futuro a tu esposa e hijo! ¡Es más! ¡Ya deberías estar viviendo con ella y no con tu hermano! ¡Tienes un mes para buscar una casa y encontrar un trabajo!.- Estalló el señor Kim, levantándose de su asiento y largandose de ahí. Todos los ahí presentes se asustaron un poco por cómo actuó pero luego siguieron platicando de cosas triviales de la vida.

- Ignorenlo, esta así por la edad. Entre más viejo más terco.- Dijo la mujer para que después todos siguieran comiendo tranquilos.

[...]

NamJoon y SeokJin se encontraban de lo más normal sentados en el sofá mediano, sólo pasando el rato como una linda pareja. Quien no la estaba pasando nada bien era el padre de SeokJin, quien estaba sentado en el sofá individual supervisando a 'esos dos' y mirando la televisión.