Limerencia (MikaYu)

Capítulo 4: Al ritmo de la lejanía

Hacía mucho tiempo que los tres hermanos Amane no se sentaban juntos en la mesa para comer, y esa cálida mañana de un lunes no fue la excepción. De vez en cuando, Yuma acompañaba en la comida a Yu; en otras ocasiones, hasta le era "permitido" estar junto a Yuichi en la mesa, pero en la mayoría de los casos, Yu desayunaba solo.

Yuma era bastante puntual en sus clases, quizá siendo exagerado en ello, y no siempre se detenía a comer algo por las mañanas. Yuichi, por el contrario, se levantaba a la hora que él quería incluso sabiendo que así se demoraba en llegar, aunque desde que conoció a Mikaela, había tomado una extraña decisión de asistir a sus clases puntualmente.

Justo cuando Yuichiro se sentó en la mesa para desayunar unos huevos revueltos y jugo de naranja, pensando que tendría que ir por su cuenta a la escuela, escuchó con claridad los pasos de alguien bajando las escaleras de la casa. Se dio la vuelta inmediatamente y desde el comedor pudo divisar a Yuichi, bien vestido con el uniforme escolar, cargando sus pertenencias y dirigiéndose a la cocina.

一Buenos días 一saludó Yu, sin esperar una respuesta de su hermano.

Normalmente no le dirigía la palabra, al menos si esta no era necesaria para Yuichi. Sin embargo, se llevó toda una sorpresa al escuchar a su hermano mientras se servía el mismo desayuno que Yu, sentándose a la mesa para acompañarlo.

一Buenas 一respondió largamente Yuichi, sintiendo el peso de toda su existencia por la mañana.

Inevitablemente, Yuichiro dejó de comer solo para apreciar a la persona menos esperada de esa casa, tomando sin preocupación un lugar junto a él, hablándole con normalidad, sintiéndolo poco, sólo un poco más como su hermano.

No quería molestarlo, ya que ese era un gran momento para disfrutar de su compañía, por lo que se propuso a no hablar demasiado y a pensar antes de decir cualquier cosa que pudiera ofenderlo, aunque no evitó ensanchar una sonrisa mientras desayunaba.

一¿Yuma ya se fue? 一preguntó Yuichi, exaltando un poco a su hermano.

一¿Eh? Ah, sí, creo que sí.

Al oír eso, tuvo cierta molestia en su interior, misma que pudo notar Yuichiro y empezó a temer el haber dicho algo erróneo tan pronto.

一¿P-para qué lo necesitas? ¿quieres algo?

一Sí, desde ayer necesito saber dónde vive Mika. Ese imbécil se niega a darme su dirección, pero ya verá cuando lo encuentre en la escuela.

Mientras Yuichi terminaba de beber el jugo, trataba de idear un plan que no fuera tan complejo, a fin de sacarle la información a su hermano. No obstante, ni bien mencionó a Mikaela, Yuichiro recordó el mensaje que debía darle a su hermano. La noche anterior, en cuanto llegó no pudo hablar con él, pues ya tenía el seguro puesto en su habitación y suponiendo que estaba intentando dormir, Yu no quiso molestarlo, pero ya era tiempo de decírselo.

一Yuichi, tengo que decirte algo. Ya sé por qué Mika no ha respondido tus mensajes. 一Dejando la comida de lado, Yuichi empezó a mostrar más interés en lo que decía Yu一. De hecho, me pidió que te dijera que lamenta no haber contestado tus mensajes; tuvo un problema con su celular y se rompió, ¡hizo boom! ¿sabes? así es imposible llamar o contestar.

Ignorando el tono en broma de Yu, Yuichi estaba definitivamente en otro asunto; le preocupaba enterarse de que su hermano y Mikaela se conociesen y lo que era peor para él, cómo fue si quiera posible que Yuichiro supiera todo eso, es decir, quería saber exactamente en dónde se encontró con Mikaela, y por qué se vería con su hermano y no con quien consideraba (aparentemente) como su mejor amigo. Empezó a malinterpretar toda la situación, y su enfado fue notorio.