Capítulo 13: Una lágrima que toca fondo

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Si bien Yuichi había huido esa noche luego de haber discutido con Yu, era cierto que tuvo una gran decepción de sí mismo por lo que le había ocurrido antes de que su hermano lo encontrara. Lo último que quería, era alejarse de Mikaela y dejarle el camino libre a Yuichiro, sin embargo, con sus manos manchadas de sangre esa noche, ¿cómo podría verlo a los ojos tan pacíficamente? Por el momento, le fue imposible.

Luego de dos semanas de vacaciones, por supuesto que ya era tiempo para él hablar con el chico que le gustaba, y aunque no lo llevaría a una cita otra vez o le daría un gran detalle, cursi y romántico; aun así, estaba dispuesto a decirle lo que sentía, lo más pronto posible, pues ya no quería esperar.

De vuelta a clases, llegó bastante temprano al colegio, algo de lo cual se dio cuenta Yuma, a quien era normal encontrar a esas horas. Pero no se acercó a él en lo más mínimo como para averiguar cuáles eran sus intenciones, y Yuichi tampoco deseaba hablarle.

Pese a ser de los primeros en llegar, no pudo ver a Mikaela antes de que iniciaran las clases, y en vista de que no compartían los mismos horarios, tuvo que ser aun más ágil para poder interceptarlo en los tiempos en los que terminaba una clase y comenzaba otra. Solo entonces pudo ahuyentar a cualquiera que quisiese hablar con él, para tener esa oportunidad de confesar su amor.

Tras llamar la atención de Mika, esta vez, pudo darse cuenta de más detalles alrededor de él, de los cuales el más llamativo fue su mirada. Era una mirada de la que estaba muy acostumbrado para su mala suerte. Por primera vez, Mikaela lo miró con decepción.

一T-tengo que decirte algo... 一apenas dijo Yuichi, sin apartar su atención de los ojos de Mika.

一En realidad, yo también quiero decir una cosa. Hace varios días, me dijeron el tipo de relación que tienes con Yu.

Sabía a dónde se estaban dirigiendo sus palabras, y quiso impedirlo.

一¿Eres el tipo de chico que hace caso a chismes? ¿Q-quién te dijo eso?

一Varios chicos de la escuela lo saben 一respondió Mika, sorprendiendo aun más a Yuichi一. Como no quería dejarme llevar solo por lo que dijo una persona, estuve hablando con más amigos de confianza, y la verdad es que todos coinciden en que no te agrada Yu.

一¿Y eso qué? Tú no tienes hermanos, no sabes cómo es esto.

一Una cosa es que no siempre te agrade, pero de eso a odiarlo o incluso a hacerle daño...

一¡No sabes nada! ¡Yo no le he hecho nada! ¡Es Yu quien siempre me fastidia!

Mika se quedó callado unos segundos, pues no tenía más que decir, así como también no tenía más que escuchar. Ya se había relacionado con los tres hermanos y su propio criterio sabía qué podía ser verdad y qué no, especialmente en relación con Yuichi y Yu.

Simplemente no borraba esa mirada de decepción, y Yuichi cada vez más y más se llenaba de ira, entre más lo miraba así.

Mika comenzó a caminar y a alejarse del muchacho, dando a entender finalmente que no le creía, y que ya no se volvería a acercar a él.

Yuichi no lo volvió a llamar, ni tampoco trató de darle otra explicación. En su cabeza, él estaba perdido nuevamente; la única persona que lo había tratado bien después de tanto tiempo, lo abandonó.

Es cierto que Yuichi tuvo un gran impulso de dejar todo; en el baño, frente a su reflejo, maldijo varias veces a Mikaela, por creerle más a otros que a él, y por supuesto que había espacio para insultar y desearle la muerte a Yuichiro también. Nadie se salvó de esa locura en sus pensamientos.

Por otro lado, Yuichi transformó esa pérdida en una competencia; quería tener a Mika solo para él; deseaba arrebatarle algo por fin a Yu.


Limerencia (MikaYu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora