Capítulo 6.-¿Cuántos reencarnados puede haber en una isla?

1K 107 19
                                    

—¿Ah? ¿Qué quieres decir? —pregunto arqueando una ceja.

—¡Espera, espera! Relájate y escucha ¿Bien? Yo soy la reencarnación de uno de los primigenios —Declara hablando extremadamente rápido tras entrar en pánico.

“No lo pareces”

Quizás mi mirada llena de escepticismo logró transmitir mis emociones, pues su nerviosismo aumentó.

¡El gran yo solamente está rodeado de potenciales problemas! ¡Pero puedo usarlos a mi favor y de esa manera lograr sobrevivir! A veces mi intelecto es tan maravilloso que me asusta.

—¿Que sucede? —declaro cruzandome de brazos y mirando a la "diosa" hacia abajo.

—¡L-Lo admito, mentí ¿Bien?! Sólo soy una reencarnada que renació como la descendiente de una familia amada por uno de los primigenios —exclama sonrojada y con los ojos llorosos.

“No es como si me importase ¿Podrías dejarme dormir o ir al punto? ”

Suelto un suspiro y coloco mi mano sobre su cabeza, el sueño me está matando y necesito que está niña me deje en paz.

—Mañana lo hablaremos mejor ¿De acuerdo? —Musito antes de separarme de ella y posteriormente irme a mi cama y comenzar a cerrar los ojos.

La niña dice una palabras que no alcanzo a escuchar muy bien y sólo levanto mi mano a señal de despedida, para que se calle y vaya de una buena vez.

La puerta se cierra y finalmente tengo paz interior, por lo que me dispongo a dormir, y en cuanto mi consciencia empieza a desvanecerse.

—¡Kazy!

Exclamando estruendosamente, Daries abre la puerta de golpe, mientras Adrienne detrás de ella se muestra nerviosa y comienza a disculparse haciendo reverencias hacia mí.

“Supongo que hoy no será mi día”

Me levanto y siento en el borde de la cama, levanto una ceja hacia la alegre Daries.

—¿Y qué quieres, hermana estúpida? —declara bostezando.

—¿Podría ser que estás enojada? —pregunta algo nerviosa.

“Interpreta mi silencio, imbécil”

Únicamente me mantengo mirándola fijamente sin decir nada más.

—¿Te vas a quedar ahí parada toda la noche? —Cuestiono con mi paciencia ya al límite.

—L-Lo siento —declara Daries extrañamente sumisa.

Suelto un suspiro y regreso a la cama, me acuesto dándole la espalda a Darles, ya que si no va a decir nada no tengo porque siquiera prestarle atención.

Y de cualquier manera tampoco es que me apetezca escucharla en estos momentos por lo que puedo simplemente ignorarla.

—S-Solamente venía a decirte que te despiertes temprano para partir, ¡Nos vemos! —exclama huyendo rápidamente de la habitación.

—...

Adrienne solamente la observo de reojo sin intervenir, únicamente volvió la mirada hacia mí, como si quisiera decir algo pero la ignoré y me centré en dormir.

¿Una Segunda Oportunidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora