Capítulo 2.-Bastardo.

308 47 7
                                    

Después de unas horas, llegamos cerca de un riachuelo, dónde me apresuro a subirme a una roca para tratar de ver desde lo más arriba posible.

—E-Espera, ¿Desde cuándo tienes tanta resistencia? —pregunta Lucía entre jadeos.

—R-Realmente eres una caja llena de sorpresas.

El gran yo tiene cosas más importantes en mente que el par de hermanos, así que me mantuve observando.

Lo que pude ver fue un puerto no muy lejos de ahí.

“¿Siempre estuvimos tan cerca de la orilla?”

Y dado que forzando la vista puedo ver tierra no exageradamente lejos —en barco— de aquí, supongo que aquél lugar será la teocracia de Laukus.

“Artkuz Leince”

Realmente quiero golpearlo y vengarme, pero de momento tendré que conformarme, incluso ahora no creo tener oportunidad alguna.

Al menos según mi imagen mental, y no debo confirmarme, estoy casi segura que aquello que mostró no fue todo el alcance de su poder.

“¿Realmente viene del mismo mundo que yo?”

—No —dijo Némesis—. Tu antigüo mundo no es el único que existe o existió, la invocación puede traer guerreros de cualquier tiempo o mundo.

“Ya veo”

Oh, cierto, podía maldecir a Némesis sin necesidad de abrir la boca, pero ya es tarde.

Me bajo de la roca y me paro frente al par de hermanos, quienes descansan a la sombra de la enorme roca.

—A veces me asombra que seas una semihumana, por tu condición diría que eres un monstruos —declara jadeando.

—Técnicamente el gran yo lo es —declaro señalandome.

—¡¿Eh?!

Tras ello, tuve un bueno rato esperando a que su ataque de pánico acabara.

—Pertenezco a una raza llamada zorro metamorfo, según me dijo padre, madre vino del exterior pero todavía no sé a qué se refiere —digo suspirando.

—¡¿El exterior?! —exclamando ambos volteandose a ver con cierta impresión.

Levanto la ceja, no puedo entender lo que pasa.

—No sería la primera vez que un ser del exterior llega a este mundo ¿Sabes?

“¡¿Eh?!”

—Los demonios, ángeles e incluso humanos, llegaron desde mundos desconocidos sin necesidad de la invocación —explica Kire.

—Toma cómo ejemplo a los gobernantes de Laukus, ambos llegaron a este mundo hace unos 700 años —declara Lucía.

Siento que me acabo de enterar de algo realmente impactante, y ellos lo explican tan tranquilamente, ¡¿Acaso era de conocimiento público?!

Me siento tan estúpida en estos momentos.

—Pero, nunca antes oí de los Zorros metamorfos —declara Lucía.

—De todos modos no es importante —musito.

—Pero entonces ¿Por qué nunca has cambiado de forma? —pregunta Kire.

No es que no lo haya hecho, sino que me dí cuenta que no es que copie la apariencia de mi objetivo, sino que simplemente me transformo a cómo sería yo según esa especie.

Por eso, si copio a un humano, sin importar si es hombre o mujer, terminaría cómo la yo actual pero sin cola u orejas.

Debido a eso simplemente me rendí con la idea de convertirme en hombre, al menos hasta que encuentre alguna manera de hacerlo realidad.

¿Una Segunda Oportunidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora