Capítulo 13.-Inservible

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—Tengan cuidado, el piso es resbaloso.

Gracias a la lluvia torrencial ciertamente no fuimos seguidos, pero también a retrasado enormemente nuestro avance, al tener que andar con cuidado por esta zona rocosa, que si ya de por sí es resbaladiza gracias a la lluvia este tipo de piedra se ablanda.

Obviamente para los que venimos de otro mundo es lo más raro, pero, últimamente he visto cosas más absurdas.

Aunque para ser honesta casi que preferiría haber evitado todo este lío, pero lastimosamente no puedo, aunque todavía tengo dudas de que decía aquella carta de padre ¿Estará en su oficina? ¿O más bien se llamaría sala real?

Pero, realmente es cansado caminar por estos lugares y hay algo que me molesta desde hace rato, o más bien una sensación incómoda.

Actualmente los más cercanos a mí, son la chica dragón, Adrienne, y Joffridus. Éstos últimos ayudan a la dragona para andar más rápido.

Gracias a las copas de los árboles, los cuáles absorben una parte importante del agua, somos capaces de mantenernos relativamente secos, aunque el gran yo se encuentra realmente mojado por antes.

Gracias a dios mi cuerpo no es tan curvilíneo, y Daries continúa a mi lado, tomándome de la mano con fuerza y con la mirada cabizbaja.

“Supongo que a ella es a quién más le debe afectar todo esto, incluso está temblando y no tiene su habitual energía”

Todo esto se ve, y huele mal. ¿Cómo puedo salir de esto? Soy débil, no puedo hacer anda ante esos sujetos.

“¡El gran yo no se rendirá!”

¿Una manera de salvar a todos? Eso no es difícil para mí supremo intelecto si me concentro en ello.

Espera, ¿Por qué vamos a la propiedad de padre para empezar? A la mente me viene aquella habitación a la que nunca he accedido.

Y con los instintos del gran yo trabajando ¿No hay algo en ese lugar que nos permita solucionar esto? Hm, no tengo forma de confirmarlo, pero podría estar casi segura.

Pero ¿Qué cosa podría hacerle frente? Después de verla, ni siquiera pude moverme.

Fue tan diferente, de la noche.

Tras unas horas a pie, logramos vislumbrar los alrededores del castillo, totalmente devastados, y con soldados en cada esquina.

En el centro hicieron una fogata, dónde están arrojando los cadáveres y alimentandolo con magia y habilidades de fuego.

Daries comenzó a temblar compulsivamente.

—No puedo más —musita sin soltar mi mano y casi al borde del llanto.

Joffridus y Ranulf no se encuentran precisamente mejor, los únicos que están medianamente normales son los príncipes, quiénes tienen una mirada más bien de rabia.

—No te preocupes, estoy aquí —musito abrazando a Daries—. Ven, debemos de apresurarnos.

Sin embargo, justo cuando creímos que estaríamos mejor, una flecha cayó cerca de nosotros y ocurrió una explosion.

Sin soltar a Daries, al golpearnos de lleno, la escondí en mi pecho y sentí una gran quemadura en mi espalda.

—¡K-Kazy!

—¡KAZUE!

Adrienne y Daries me miran con preocupación, pero, lo realmente alarmante son los tres golpes en seco que llegaron poco después de la explosión.

Siendo en efecto, esos tres.

—Karina, niños, váyanse —declara Aldebaran.

Sin mediar más palabras, toca el suelo y comienza a temblar, el suelo delante de nosotros se eleva.

¿Una Segunda Oportunidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora