Harry Potter, el niño que vivió, se encuentra en su tercer año escolar en el colegio Hogwarts de magia y hechicería, lleva 2 años odiando a el tal rubio que tanto lo irrita, o eso es lo que él cree...,¿Acaso puede llegar a amar con locura a su enemi...
Hagrid una vez había terminado de nombrar a todos, prosiguió con la clase -muy bien, ahora que están todos, fórmense con sus parejas para ir con un hipogrifo- los estudiantes a regañadientes se acomodaban uno por uno junto a su compañera.
- Muy bien... ¿Quiénes serán los primeros?¿ Quién quiere conocerlo?- dijo el guardabosques señalando a Buckbeak- Eso es Harry y Malfoy- los dos muchachos quedaron aturdidos, al parecer todos habían retrocedido, excepto ellos...
Harry y Draco se asomaron con pasos temblorosos a donde estaba Hagrid, al parecer listos para las indicaciones del profesor.
- Vengan acá- les dijo el mayor a ambos- Dejen que él haga el primer movimiento, sean amables... ahora acérquense- los dos chicos intercambiaban miradas sumamente nerviosas- e inclínense y esperen a ver si él les responde, si lo hace pueden tocarlo, si no... ya veremos luego.
El azabache y el rubio procedían a hacer todo lo que les habían indicado, Harry de los nervios iba algo rápido, mientras que Draco... bueno... él casi que ni se movía.
Una vez ya se encontraban a una distancia buena de Buckbeak, Hagrid indicó con su voz baja- ahora inclínense... muy despacio- Draco al estar sumamente tieso, lo había logrado, ya estaba inclinado a algunos pasos frente a la criatura, sólo faltaba Harry, pero este no se estaba inclinando tan lento como debía.
Buckbeak giró de golpe agitando sus alas hacia donde estaba Harry- atrás Harry, apártate, Malfoy tu quédate sumamente quieto- Draco no despegaba su mirada de Harry, temía que algo le pasara, necesitaba protegerlo...
En cuanto a Harry, este se iba dirigiendo hacia atrás, hasta que hizo sonar una rama con su pisada, -no te muevas... no te muevas- dijo Hagrid. Definitivamente sentía que era su fin, pero no podía renunciar hasta tocar esos labios rojos del rubio que tenía al lado, así que solamente prosiguió a quedarse quieto enfocando sus ojos con los de Malfoy.
Después de unos segundos, Buckbeak se inclinó frente a Draco y Harry, al parecer los dos lo habían logrado.
- Bien hecho, chicos, bien hecho- y ahora mirando a Buckbeak dijo: Ay, tu te lo mereces, y lanzó una porción de comida para este.
Los chicos se inclinaron sonriéndose entre ellos, el contacto visual del otro funcionaba para calmarse mutuamente, pero los nervios volvieron cuando Hagrid anunció que ya podían tocarlo. Nuevamente los nervios volvieron, pero ahora ya estaban más seguros de la criatura, así que iban avanzando a paso lento pero firme.
- Adelante, sin miedo.
Cada vez iban avanzando más...- cuidado, vayan lento. Despacio... despacio- decía Hagrid.
Harry de la emoción iba un poco más rápido, y por eso Buckbeak cerraba y abría su pico a cada paso. "¿Acaso quieres morir, Potter?" se decía Draco en la mente, nervioso de que algo le pasara al ojiverde.
- Despacio Harry- era lo único que decía el semigigante- Tómenlo con calma, dejen que se acerque a ustedes.
Los dos chicos ya uno al lado del otro decidieron quedarse quietos, y ver como reaccionaba la criatura, la verdad es que parecía un perro, olfateaba al rededor de sus manos extendidas, y con esos ojos curiosos los observaba a cada uno.
En un abrir y cerrar de ojos, Buckbeak tenia su pico debajo de las palmas de los chicos, enserio que lo habían logrado- Bien hecho, chicos, fantástico! Perfecto, excelente!- repetía Hagrid con una enorme sonrisa.
- Bueno no tuve miedo. Eso fue fácil- a pesar de sus palabras, Draco Malfoy estaba más pálido que de costumbre, y un ojiverde tenía que aguantar la risa frente a ese comentario.
Después de una ronda de aplausos y varias sonrisas disimuladas entre ambos chicos, Hagrid siguió hablando- Bueno, parece que les dejará montarlo- Los dos se quedaron completamente petrificados, como si inclinarse y eso no hubiera sido para tanto.
Primero Hagrid agarró a Harry de la cintura, posicionándolo en la espalda de Buckbeak, y luego prosiguió con Draco, acomodándolo detrás de Harry, y claramente ambos chicos estuvieron pataleando y diciéndole a Hagrid que los bajara.
-Muy bien, colóquense detrás de las alas, y no le arranquen las plumas porque no le gustará.- Finalizado esto, Hagrid dio una palmada sobre Buckbeak indicándole el despegue, tanta fue la fuerza, que Draco casi se cae, y de un momento a otro, se encontraba sosteniendo la cintura de Harry; ambos chicos estaban completamente rojos, pero llenos de adrenalina al mismo tiempo.
Buckbeak seguía corriendo y extendiendo sus alas, hasta que por fin saltó y voló:
-OUHHH!!!- Gritó Harry.
-AHHHH!!!!- Chilló Draco.
Los dos estaban atónitos, no podían creer que se encontraban volando sobre los terrenos de Hogwarts, claramente era muy diferente de volar en escoba, era completamente mágico, estaban maravillados de tener esa hermosa vista sólo para ellos.
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Buckbeak subía cada vez más alto, hasta sobre pasó la torre más alta de Hogwarts, literalmente podían tocar las nubes. Luego de unos segundo descendieron, justo encima del rió, ahora ellos podían tocar el agua.
- Esto es completamente hermoso- dijo el ojigris.
- Estoy muy de acuerdo contigo.
-Tu eres hermoso, Harry...- ante estas palabras, al azabache se le había subido mucho más el color rojo de su cara, pero no lamentó para nada lo que estaba apunto de hacer...
Harry volteo lo más que pudo, (sin dejar de sostener a Buckbeak, claramente) se volteo para lograr hacer contacto visual con esos ojos grises. Draco miraba también esos ojos verdes, sin embargo, también se encontraba visualizando los labios de Harry. El ojiverde se percató de esto, se puso demasiado tímido, pero no perdería ese momento por nada en el mundo.
-Bésame ya, quieres...- Draco abrió sus ojos como platos al escuchar las palabras del otro, también estaba tímido, pero cada vez se iba acercando más...
-Lo que tu ordenes, Mi León...- el rubio alejó una mano de la cintura de Harry, y la posicionó en la mejilla izquierda del otro, hasta que por fin unieron sus labios en un algo torpe, pero tierno beso, y al fin Draco Malfoy y Harry Potter se dieron su primer y mágico beso...
