Capítulo 36 ||Final||

50 2 3
                                    

Todo pasa tan rápido frente a mis ojos, todo se mueve, las luces relampagueantes me estan mareando y no puedo evitar recordar una y otra vez el rostro de Harry, me está doliendo más a mi que al él haberlo dejado.
Lo amo aún cuando mi corazón está palpitando sus últimos latidos.

6 meses pasan rápido cuando estas cumpliendo un sueño, todo pasa rápido cuando parece que estas en un cuento de hadas.

Todo ha terminado

Alguien susurra en mi oído. ¿Qué demomios?

Fin del juego

Otra vez. ¿Qué mierdas está pasado?

Es hora

Estoy asustandome con esto.

Cada vez tengo menos control, solo puedo quedarme quieta mientras todo lo que esperé alguna vez esta pasando. Todo lo que esta guardado en mi memoria pasa como si alguien estuviese mostrandome una cinta de mi vida completa, como si estuviese viendo cada capítulo de mi vida, todo esta ahí, la película de mi vida, cada día, cada hora, cada segundo esta pasando frente a mis ojos.

— Conectala— alguien a mis espaldas, dice.

Mis ojos se cierran justo en el momento en el que siento una aguja entrar en mi brazo, una luz cegadora inunda mis pupilas justo cuando un ya un conocido pitido suena en la habitacion que yace vacía.

***

Mis ojos se abren, y comienzo por escanear la habitación, estoy en el hospital, ¿no estoy muerta?. Algo de alivio despierta en mi interior.

—¡Dios mío!—un jadeo se escucha cuando la puerta se abre.
Estoy sonríendo con esto, lo sé, no estoy muerta, puedo vivir junto a Harry.

Mis ojos se dirígen hasta la ventana iluminada por el sol. Es un día soleado ahí afuera y espero que hoy pueda salir de aquí y dar un paseo por aquel parque en el que fui con Harry.
Quiero ver a los chicos, quiero abrazarlos, quiero reír sobre esto con ellos.

—¡Despertó!—la enfermera grita conmosionada—¡La paciente despertó!—grita de nuevo y un señor con bata blanca entra a la habitación.

—Es un milagro— él susurra con sorpresa.
Lo sé, esto es un milagro, quiero decir, íba a morir

—Estoy viva—sonrío y veo como mis manos tienen pequeños broches. No entiendo el por qué pero ignoro eso.

La puerta se vuelve a abrir y veo a mi madre entrar junto a mi padre con tazas de café.

—¡Mamá!—sonrío esperando un abrazo y algo como: "¡Maddie cariño!" Pero no, ella se queda inmóvil con el ceño frucido y puedo notar que esta temblando.

— ¿Papá?— sonrío de nuevo. ¿Qué les pasa? Sí, deben estar en shock pero esperaba una reacción diferente de su parte.

Mi madre pone la taza sobre la mesa y se acerca a abrazarme. No hay emoción, esta abrazándome sin ninguna emoción, como si lo hiciese por compromiso.

Mi padre le imita y se acerca a abrazarme. Ambos me rodean y siento como mi padre besa mi cabeza y mi madre solloza.

—Te extrañé— él dice, sonrío para mis adentros.

—¿Dónde estan los chicos?, ¿Dónde está Harry?—pregunto, todos se miran entre sí como si de una tontería se tratara.
¿Qué rayos esta pasando con ellos?

— ¿Harry?—pregunta mi madre

— Si, ¿donde esta Harry?—rectifico

— No lo sé, en algún lugar dando un concierto—dice ella. ¿Qué? ¿Dando un concierto?

Don't Forget Me ||Editando||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora