Capítulo 28

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Harry se vuelve y veo a mi madre acercarse con una taza en sus manos y a mi padre en el teléfono.

- Oh por Dios Maddie ¿Dónde rayos estabas?- pregunta Harry mientras llega hasta mi y me toma entre sus brazos.

- Solo fuí a caminar- me encogo de hombros aún en medio de su abrazo.

- Sabes lo peligroso que es salir a estas horas- dice mi madre

- Todo está bien- ruedo los ojos ante ella

- Tu madre me explicó todo- Harry me susurra

- ¿Qué?- susurro para ambos

- Si- se aclara la garganta- ella me dijo que fue ella la que llamó a los reporteros y eso- se encoge de hombros

- Mmm- digo pero no puedo ocultar la sonrisa

- ¡Bien!- ríe- Lo siento, estaba frustrado...

- Estabas molesto- lo interrumpo

- ¡No!- ríe, amo verlo reír así y aún más cuando tiene sus brazos rodeando mi cintura, la manera en la que su cabeza se mueve cuando lo hace, la manera en la que sus labios se curvan y deja ver sus hermosos hoyuelos, amo esto- no podría enojarme contigo- sonríe

- ¿Así que solo me colgaste porque estabas frustrado?- río

- Uhm...Touche- encarna una ceja o eso trata

- Bueno ya que todo esta bien, pues...- mi madre sonríe pero sigo molesta con ella, si le agradezco por haber arreglado esto pero sigo molesta por haber hecho de esto, un escandalo- Maddie ¿tienes hambre?- ella pregunta

- No- digo, Harry se separa para verme con el ceño fruncido ligeramente

- Debes comer- él dice

- No tengo hambre- suspiro

- ¿Quieres que te dé de comer yo?-bromea, me río pero niego

- ¿Qué pasa?- mi padre pregunta soltando el teléfono

- Madison no quiere comer- mi madre dice con una pizca de sonrisa

- Oh. ¿por qué?- mi padre pregunta

- No tengo hambre- sonrío discretamente

- ¿Maddie pasa algo?- Harry me susurra

- Si- susurro, debo decirle lo de Justin, me arde la piel de solo pensar en contarle toda la historia, aunque sé que el no me presionaría para hacerlo, sin embargo por alguna razón siento que debería contarle todo, no lo sé, quizá para superarlo.

- Oh, bueno ¿Quieres contarme?-pregunta, asiento, él suspira y le avisa a mis padres que subiremos, por una parte quiero decirle que si puedo ir a su casa pero me apena hacerlo así que solo lo sigo mientras toma mi mano.

- Es aquí- digo cuando llegamos a la puerta de mi habitación

- No me digas, pensé que era de tu madre- ríe con ironía al ver los posters de ellos en mi puerta.

- Espera a ver por dentro- río con él, se escucha un jadeo de su parte cuando abro la puerta.

Mi habitación es en su mayoría un museo de fotografías de los chicos.

Mis ojos se abren cuando recuerdo que en medio del techo hay una foto de ellos desnudos, obviamente es algo como un montaje pero de igual manera es vergonzoso.

- Es...

- ¿Obsesivo?- río

- Asombroso- sonríe

Don't Forget Me ||Editando||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora