titulo fachero xd

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— ¿Aún te sigues quejando de los trajes Patrick?, es básico saber que la ofensiva mágica suele acompañarse por el fuego—rezongó entre toses uno de los uniformados a su colega de la derecha.

—De que sirve que sean ignífugos si antes me van a matar por hipertermia, ¿no se les ocurrió hacerle respiraderos? —respondió Patrick intentando moverse por entre las cenizas y pedazos de lo que antes se podía llamar guardia de los secretos.

—Un solo resquicio en el traje basta para que las llamas se adentren en tu piel hasta calcinarla—reprochó Maverick cubriéndose la nariz para evitar toser como su compañero Danny.

— ¿Podrian cerrar el hocico de una buena vez? Estamos eliminando los resquicios de magia demoniaca que quedo en el condado, no somos malditos niños exploradores—rugió Jameson a sus subordinados.

Y solo el viento respondio entre susurros de una trágica soledad, para entonces, Jameson ya habia avanzado lo suficiente a la caseta como para besar la puerta con su oreja y percatarse de que la multitud de magos parecía haber desaparecido ya que no habia un indicio de sonidos que delataran la existencia de vida... o al menos eso pensaría un principiante. Disponiéndose a abrir la puerta saco una extravagante llave que ocultaba en una abertura de su traje a la cual la puerta solo pudo ceder. Los uniformados entraron a la ofensiva apuntando sus fusiles a cada costado sin dejar lugar a un punto ciego, intercambiaron miradas suspicaces y no hubo necesidad de palabras para comunicar la estrategia que seguirían a continuación, iniciarion una timida caminata en la que el talon de sus botas golpeaba el suelo en busca de un minimo espacio que resultara diferente... las paredes emanaban un aspecto enigmático con figuras asociadas a deidades donde se podían apreciar gigantes vestidos con túnicas azules, eran seres ominosos equiparables con las figuritas de acera que son macizas y carecen de alma y voluntad, eran calvos y asquerosos, depronto Danny se detuvo en seco y alzo su palma para llamar la atencion de sus camaradas e indicarles con el dedo índice que debajo de si habia una anormalidad.

—Maverick, has tu magia—le ordeno Jameson a su principal ingeniero a cargo del equipo tecnologico.

Maverick entonces saco de su traje una navaja eléctrica que poseía un interruptor en el mango del que su portador activo y a su vez, la navaja empezó a salpicar de chispitas azules que giraban alrededor de la navaja a lo que procedio sacar provecho poniéndose en cunclillas sobre el suelo y apuñalando al mismo rajándolo con un corte en circulo tan perfecto que un cirujano podría envidiar, el suelo cedió rompiéndose y dejando ver un pasaje secreto, oscuro sin aparente presencia de vida.

El equipo de Jameson procedió a bajar con cautela por este sumiéndose en una habitación lúgubre. Jameson saco un aparatito cilíndrico que radiaba una luz tenue suficiente para no perderse en el vacio de la habitación, unos pasos invisibles se dieron a conocer cada vez mas rapidos y decisivos, rebelando una voz femenina.

—No nos hagan daño dejadnos en paz se los suplico no herimos a nadie queremos. —Fue callada fugazmente por una bala que la dejo yaciendo en el suelo de sus propios lamentos, que el principiante Patrick disparo horrorizado dejando caer su arma preso del pánico.

—Shh, controla tu respiración, ¿o quieres hacerle mas fácil la localización a nuestros enemigos?—reclamó Jimmy el estratega.

—¿No tengo tiempo para alarmarme? Acabo de volarle la cabeza a un demonio que suplicaba por su vida.

—Somos cazadores de monstruos, si nadie mas hace el trabajo, la energía poltergeist renacerá de las cenizas y volveremos a la edad oscura que tanto nos ha costado por generaciones ocultar al mundo—le reprendió Fanny clavando el gélido azul de sus ojos al piso.

—Avancen, frente en alto—ordenó Jimmy dando unos pasitos adelantándose a su grupo que le siguió, todos con sus armas levantadas y guardando cautela para contraatacar en caso de situaciones inesperadas.

De pronto, Jimmy detuvo su marcha de golpe, sin decir una palabra giro su cabeza hacia el escuadrón esbozando una sonrisa pícara, una de sus extrañas costumbres siempre que daba con tener la razón en uno de sus planes, aunque en este momento no habia mencionado nada acerca de un plan... Aunque no fue necesario mencionarlo puesto que, volviendo una vez mas su cabeza, fijó su arma hacia el frente y con un movimiento frio jalo el gatillo de esta dispersando sangre a montones por el alrededor.

—Camuflaje—dijo repentinamente volviendo a dibujar una enorme sonrisa sobre si mientras se disparaban montones de gritos de todas partes, revelando una horda de desesperación por parte de los magos que habian estado todo el tiempo en la misma habitación, pero ahora descubiertos, ni su invisibilidad podía salvarlos de la ira de los cazadores.

—Alcen sus armas al enemigo—ordenó Jameson con su voz imperante a punto de quebrarse.

—No, que están haciendo, ¿me están jodiendo?—sollozó Patrick con su arma temblando al compás del acelerado latido de su clemente corazón.

—Patrick, estas criaturas mataron a tu esposa, ¡juraste por tu espíritu aventurero portar el orgullo del cazador!—le gritó Ben sujetándolo por los hombros con la mirada desesperada.

—Fuego—murmuró Jameson, un sonido apenas audible pronunciado por una boca pesada que se negaba a hablar, era consciente de la masacre que cargaba sobre sus hombros, una tradición en su vida, ser el espectador de como las llamas que encendían el alma de unos... debía ser aplastada hasta la extinción de la misma para avivar la de otros, un principio en el que incluso concordaba con los magos, para poder dar vida a una nueva esencia, antes otra debe morir.

El escuadron en sincronía armonica jalo el gatillo hacia los magos que se arrodillaban suplicantes en vano, pues la decisión ya habia sido tomada desde que sus defensas fueron arrebatadas. La boca de las armas iluminaba intermitentemente la habitación con cada disparo, dejando ver como una habitación con techo daba paso a una lluvia carmesí, adornando los trajes de salpicaduras rojizas, suplantando el sonido del silencio pacifico por el de disparos implacables y gritos sofocantes, Patrick ni siquiera era capaz de oir los gritos de sus víctimas, ¿como habia llegado a este preciso instante? Su arma se disparaba sola pero su mente y sus ojos estaban en un planeta lejano donde no habia inocentes, solo demonios que habia que cazar, porque claro! Ese justo era el motivo por el que se habia unido al grupo de cazadores, quería salvar a inocentes de los monstruos, pero nunca se habia tenido que preguntar, ¿que hace que algo se llame monstruo? Su sangre? Su aspecto? Sus actos? Acaso... Patrick era el monstruo? Estaba... asesinando a inocentes? No! Pensó. Claro que no, solo estaba salvando a la humanidad de los monstruos, si, eso estaba haciendo.

—Monstruos, estoy salvando a la humanidad de ellos—rumoreó enseñando una sonrisa a sus compañeros—. Mirenme, JAJA, ¡puedo combatir el mal justo como lo hacia la orden Jedi!—exclamó con una alegría tan infantil como ingenua mientras su arma se disparaba una y otra vez hacia los magos, sin descanso, hasta que ya no quedo ningún monstruo que cazar.

Aventuras extraordinarias de criaturas pasionariasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora