"—Tenemos problemas bebé."
Me despierto de un sobresalto, pensando que todo fue un sueño.
Pero no.—Mierda —comienzo a llorar.
No veo nada, supongo es una habitación oscura, no entra luz por ningún lugar.
Miles de cosas pasan por mi cabeza.
¿Dónde está Gaspar? ¿Cómo estará? ¿Dónde estoy?
Quiero salir de aquí...Escucho el sonido de una puerta, entra luz de un lugar.
Veo una figura masculina.
Se prende la luz de la habitación, demasiado fuerte. Cierro instintivamente mis ojos, hasta acostumbrarme a la luz.—Ten —lo veo frente a mí con una bandeja.
Su cara está tapada con algo negro, y viene vestido de negro entero.
—¿Qué quieren? —comienzo a llorar.
—Tienes que comer...
Pateo la bandeja, haciendo que todo caiga encima de él.
Con su mano limpia su ropa y su cara.—Isabella, de todos soy el único que te va a aguantar ésto —me toma del brazo—, otro simplemente te golpearía. Así que deberías colaborar conmigo.
—Suéltame hijo de puta —me zafo de su agarre.
—No conseguirás nada así.
Se levanta.
Toma todo lo derramado y sale de la habitación.
Busco algo en donde poder escapar, pero no veo nada, es como una habitación de pánico. Intento abrir la puerta, pero es imposible.—¡AYUDA! —grito.
Sin respuesta.
—¡AYUDA!
Se abre la puerta, entra la misma persona.
—¿Quieres ver a tu noviecito? —cuestiona.
Asiento.
—Ven aquí.
Obedezco, camino hasta quedar frente a él.
—Date vuelta —ordena brusco.
Lo hago, toma mis manos y me las amarra con unas esposas.
Abre la puerta, me saca a mi primero, luego sale él. En ningún momento me suelta.—Mierda —dice.
Me toma de los hombros, y con una cinta tapa mi boca.
—No intentes gritar...
No lo hago.
Me afirma del brazo y caminamos hasta una puerta negra.
La abre.—Tienes tres minutos.
Entra conmigo, me suelta. Se prenden las luces.
Ahí lo veo... En el piso, rodeado de sangre e inconsciente
—Gaspar —lo muevo despacio.
No responde.
Observo si está respirando.—Gaspar —tomo su cabeza y la apoyo en mis piernas—. No responde...
—Casi lo matan, sólo está inconsciente...
Se acerca a nosotros, toma a Gaspar y limpia alguna de sus heridas.
—¿Por qué nos ayudas? —cuestiono.
—Porque no me interesa nada de ésto.
—¿Y qué haces aquí?
—Demasiada información Isabella.
Solo puedo ver sus ojos claros, lo demás está todo cubierto.
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HUYE DE ÉL ©
Teen FictionCuando dos chicos trazan un plan, todo parece resultar perfecto... Hasta que uno de los dos descubre la verdad, y decide caer en la tentación. "Él no es quien crees..." Mundos opuestos juntos en una historia llenas de mentiras. "Te miente." ¿Los pol...