Un paso a la realidad

Capítulo 19 <<Todo va bien>>

-Sami, no tocaste tu postre. – dijo Trinidad sacándome de mis pensamientos

Estábamos en la pequeña gran plaza, sentadas en el pasto comiendo helado. Frutilla y crema americana era lo que más me gustaba. Trinidad tenía chocolate, también frutilla y crema del cielo. El día estaba hermoso, el sol brillaba cada vez más. Era un día muy caluroso.

Trinidad me chasqueó sus dedos delante de mis ojos.

-¡Hey! – La miré – ¿Por qué no dejas de mover tu helado con la pequeña cuchara y lo comes de una vez por todas?

Di un bocado.

-Perdón… – antes de seguir ella me interrumpió

-¿Qué sucede? – preguntó mientras limpiaba el helado de sus manos chupándolo

- Facundo me besó – dije normalmente

-¿Qué? – Preguntó dirigiendo su mirada hacia mi – ¿Facundo? Es broma, ¿verdad?

Negué con la cabeza.

-¿Te besó después de la piña que te dió? – Dijo un poco molesta – ¿Quién se cree que es?

Mostré una sonrisa al saber que Trinidad, por lo visto, se preocupaba por mí.

-¿Te gusta? – preguntó arqueando una ceja

-Sí, y mucho – dije con una sonrisa –pero… 

-¿Pero? – preguntó

-suspiré – pero creo que también me gusta Benjamín

Trinidad abrió su boca dejando caer el poco de helado de su boca de al pequeño recipiente del helado.

-rió – Oh, problemas. – Dijo revoleando los ojos – eso me pasó antes de lo sucedido en mi estúpida vida. Tal vez, pueden gustarte los dos al mismo tiempo o tal vez no. Pero tienes que pensar bien sobre lo que sientes – dijo metiendo su cuchara en su boca – quizás es obsesión y no lo sabes. Facundo apareció primero en tu ‘gran’ vida, y luego Benjamín. Con Facundo nunca hablé, ni siquiera sé cómo es su personalidad o que mierda, pero con Benjamín se basó nuestra infancia aunque a veces lo odiaba.

Reí después de su ‘consejo’, creo que podríamos llamarlo consejo.

Creo.

¿Qué mierda? Quiero salir de esta sopa de letras.

No quise mostrarle el mensaje de texto a Trinidad porque sé que me cargaría por el resto de mi vida.

-Tal vez sería como lo dices, pero mi cabeza está algo confusa. Con Facundo me siento bien, es muy caballero y tierno, siempre lo fue. Y con Benjamín… – dije mirando hacia los niños que estaban jugando – me siento segura y protegida cada vez que estoy en sus brazos. Tal vez sería mejor olvidarme de los dos por un tiempo. – suspiré

-Sí, yo haría lo mismo, hermanita – dijo con su mano en mi hombro

 Me gustó este momento de hermana a hermana que estábamos pasando con Trinidad. Ojala, en los tiempos pasados, nos hubiéramos llevado muy bien, eso me agradaría mucho. Estoy disfrutando del momento. Estaba a punto de contestarle, pero Trinidad dirige su mirada detrás de mí. Voltee y me agradó ver a esa gran persona detrás mío, me levanté a darle un profundo abrazo mientras que Trinidad cambió su alegre cara por una más seria.