Durante las décadas de los años sesenta y setenta, los golpes militares se convirtieron en un fenómeno recurrente en diversas regiones, marcando una época de inestabilidad política. No obstante, él no representaba la figura tradicional de un general...
Cuando Choi Jinri pensó en la idea de crear a Taehyung que para ese año y tiempo su nombre era D-36. Idealizo su experimento para el bien de la humanidad, para la evolución, no para explotar y matar de tan fea manera a seres tan preciosos, tanto Choi Jinri, como Jeon Sungjae crearon un desastre y todo ese desastre proviene de solo un pequeño tubo de formula, podría haber vuelta atrás si el tiempo se pudiera regresar, pero obviamente que eso es imposible.
Tal vez el tiempo no se pueda regresar, pero Sungjae puede cambiar el final de todo esto si toma las decisiones correctas.
Esa noche Sungjae recordó a la madre adoptiva de Taehyung, aquella mujer que lucho por demostrar que las mujeres son tan capaces de dar voz y voto en las cosas, Jinri solo quería demostrar sus inventos y convertirse en una gran científica reconocida mundialmente, pero jamás fue así, Jeon Sungjae sonrió enternecido al saber que se ganó un título aún más poderoso y ese es el ser madre de cierto chico tan precioso, tal vez ella no lo dio a luz, pero en Taehyung corre la honestidad y la valentía de aquella mujer.
Choi Jinri siempre amo al pequeño bebé que su esposo trajo a casa, años después descubriría con sus propias manos que ese pequeño se trataba de aquel niño robado de aquellos laboratorios, encarando a su esposo este le confeso la verdad y bajo un pacto de silencio juraron llevarse aquel secreto a la tumba, Jinri siempre cuido de Taehyung y entendió que a pesar de no ser su madre bilógica amaba a ese niño con toda su alma y de lo que ella no podía arrepentirse es de haber pensado en aquel experimento.
Taehyung siempre amo a su madre, suele recordar cuando le contaba cuentos y le defendía de su padre, siempre dio la cara por el sobre todo y todos, era su pequeño oso de invierno como ella solía llamarlo por el mes en que nació.
Al final del día Kim Minho y su esposa Kim Jinri se llevaron a la tumba muchos secretos que en su tiempo pensaban contar a su preciado hijo, uno de aquellos secretos es que Kim Taehyung es tan excepcional, es aquello que amaron y que amaron hasta el día de su muerte y a pesar de las injusticias cometidas por ambos ninguno se arrepentía, pues dicen que el amor puede ser tu condena y a la vez tu salvación y el amor que ellos le tenían a su hijo lo era, Kim Minho jamás se arrepentiría de haber rescatado a ese pequeño aquel diciembre de 1936 y Kim Jinri jamás se arrepentiría de haberlo creado aquel Abril de 1936.
Kim Taehyung tenía una familia que a pesar de mantenerlo escondido por su condición siempre lo amaron y a pesar que a sus veinticinco años poco se lo demostraron siempre les agradecerá el protegerlo y amarlo a su manera a pesar de haber hecho grandes injusticias, Kim Taehyung se convirtió en una leyenda desde el día que nació, no solo porque había sido creado, no definitivamente no, se convirtió en tal cosa por lo que llevaba dentro de él, aquel patógeno mezclado corre por sus venas, él podría haberse enamorado de una chica y seguir con su vida normal, tener una familia que es capaz de dar, pero no, elegio lo que ama desde pequeño, elegio amar a un hombre a pesar de estar contra las reglas y ese hombre es Jeon Jungkook y con esa razón le bastaba para no rendirse jamás.
Kim Taehyung solía pensar que el tiempo es un ladrón, robando todo lo que él amaba.
Ahora comprende que el tiempo te da algo antes de quitarte algo. Y cada día es un regalo, cada hora, cada minuto, cada segundo.
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