Capítulo 23: Reconciliación (parte 1)

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Narra Lett

Después de vestirme, salgo de la habitación y me dirijo a la habitación de Daniel que se encuentra a la vuelta de la mía.
Al voltear, veo a Daniel fuera de su habitación sosteniendo del brazo a la misma rubia de esa vez en en centro comercial. También me percato que su mejilla izquierda está fichado por el labio de aquella rubia.
Una punzada invade mi pecho y lágrimas caen por mi rostro, mientras cruzo miradas con Daniel.

-No puedo seguir presenciando aquella escena y doy media vuelta para irme.
- Como pudo hacerme esto. No creí que le desagradaba tanto como para traer a su amante hasta aquí- quizá de su romance quiso hablarme.

Al llegar a mi habitación con el corazón destrozado, siento unos fuertes brazos rodear mi cintura.

Narra Daniel

Al salir de la habitación, llamo a seguridad para sacar a Adela del hotel. Mientras miro a Adela enojado y espero la ayuda, volteo y me encuentro con una hermosa mujer de ojos lindos llorando. Mi corazón se rompe y desespera al verla irse.
Después de unos segundos, llega seguridad para sacar a Adela del hotel, y mientras la sacan empieza a decir que que yo la amo, que es mi esposa y que la prueba de nuestro amor está grabado en mi mejilla. Al principio no la doy importancia, pero después de pensarlo, saco un pañuelo y limpio mi mejilla mientras voy corriendo a la habitación de Lett.
Al verla a punto de abrir su habitación, sin pensarlo dos veces rodeo con mis brazos su delgada cintura.

-Da...Daniel. Quiero el divorcio si eso te hace feliz- dice en voz baja y con tristeza mientras mi corazón duele y quedo sin palabras.

Narra Lett

Lo siento callar y eso me duele mucho. No me queda otra cosa más que aceptar la realidad.

- No te preocupes no te pediré nada- digo mientras las lágrimas caen y toco sus manos para quitarlos de mi cintura.
-Lett, te amo- dice Daniel con un tono de voz dulce mientras me sostiene con más fuerza la cintura para después dejar caer su cabeza en mi hombro.
-Da...Daniel- apenas puedo pronunciar su nombre después de escuchar esas dos palabras tan hermosas y significativas para mí, que al salir de sus labios hacen mi corazón saltar de alegría mientras ahora lágrimas de felicidad caen por mis mejillas.
-shhh... Está bien si no sientes lo mismo, pero quedemonos así solo por un momento- dice Daniel mientras seco mis lágrimas para después girar y quedar cara a cara con él.

MATRIMONIO POR CONVENIENCIA: Enamorada del Frío CEODonde viven las historias. Descúbrelo ahora