MATRIMONIO POR CONVENIENCIA: Enamorada del Frío CEO

Capítulo 21: Discusión

Narra Lett

Después de bañarme y vestir un vestido veranero y unas zapatillas blancas, me dirijo fuera del hotel mientras cruzo la mirada con Daniel, quien viste un pantalón negro, camiseta blanca y unas zapatillas del mismo color.

En la cafetería de París

-Daniel gracias. Esto es hermoso, pero no era necesario reservar la cafetería- digo sorprendida mientras veo una sola mesa bien arreglada en el centro de la cafetería.
-¿No te gusta o hubieras preferido que comprara la cafetería?- dice mientras frunce el ceño y cruza los brazos.
-Si me gusta, pero- digo mientras lo veo retirar la silla para sentarme.
-¿pero?- dice mientras retira la silla para sentarse.
- Pero no era necesario ya que estoy a tu...- digo nerviosa mientras suena mi celular y veo a Daniel fruncir más el ceño.
-¿Quién es?- dice mientras leo el mensaje de Gabriel que se irá a los Estados Unidos.
- No puede ser. No te preocupes, te lo contaré más adelante- digo con voz triste mientras Daniel me mira con enojo.
- ¡Maldición! Que no me preocupe cuando sé que es tu amante quien te manda esos mensajes- dice mientras da un golpe en la mesa y doy un salto por el susto.
-¿A... amante? Es sólo un gran amigo. Lo mal interpretaste- digo nerviosa y triste mientras siento una lágrima recorrer por mi mejilla.
- ¿Así?, también malinterpré cuando ese chico rubio que eligió el vestido que llevas puesto, tomó tus manos y te dio un beso en la mejilla aquel día en la cafetería- dice alzando la voz.
-Sí, también lo malinterpretaste. Ya te dije que Gabriel es mi mejor amigo- digo entre lágrimas.
-¡Por dios, no mientas! Si fuera cierto ese rubio hubiese estado presente el día de nuestra boda felicitándonos- dice Daniel con enojo  mientras aprieta sus manos.
-No pudo asistir por problemas personales- digo mientras tiemblo.
-Escucha Lett, esto es sólo un estúpido matrimonio por conveniencia. No lo olvides- dice Daniel mientras se levanta.
- Da...Daniel- susurro entre lágrimas mientras lo veo desaparecer por las calles de París.

En la noche

- Que raro que no duermas aún- dice Daniel recorriendo mi cuerpo con su mirada.
- Daniel, estas borracho y no pienso discutir- susurro mientras lo dirijo hasta la puerta.
- ¿Tanto me desprecias?- dice enojado mientras toma mi brazo y me tira a la cama.
- Da...Daniel- lágrimas caen por mis mejillas al verlo besar y morder mi cuello.
- ¿Qué pasa?, ¿no quieres satisfacerme?- dice mientras me quita el polo y besa mi vientre.
- Sueltame, por favor. No quieres hacerme esto, te arrepentirás- lloro y suplico entre lágrimas.
- ¡Maldición!, eres mi esposa- dice para después ponerse la camisa y salir de la habitación mientras abrazo y lloro sobre  la almohada.