Levantarse por las mañanas era duro, pero lo era mucho más sabiendo que Deku estaba a su lado. Esos pocos segundos desde que sonaba su despertador, hasta que él se levantaba definitivamente eran los más felices de su vida. Eran unos segundos donde tenía a Deku en el sitio donde quería tenerle el resto de su vida: a su lado.
Los segundos se convertían en un par de minutos donde aprovechaba para observar su rostro angelical dormir plácidamente. Girado hacia él, sus pequeñas fosas nasales se movían suavemente por su respiración. Sus párpados, completamente relajados, le permitían continuar descansando y sus pequeñas pecas le hacían parecer todavía más inocente frente a la leve luz de la lámpara de la mesilla.
Tan sólo dormiría media hora más antes de tener que despertarse e ir a trabajar. Si por Bakugo hubiera sido, habría dejado dormir a ese chico mucho más rato y él velaría por su sueño durante horas.
Llevó su mano con mucha suavidad a su frente y la apoyó intentando no despertarle. Estaba un poco caliente, pero no parecía tener fiebre.
— ¿Kacchan? — susurró Deku. Bakugo se tensó. No quería que ese chico viera esa debilidad por él y, por eso mismo, apartó la mano con rapidez. Sin embargo, al ver que sus ojos permanecían cerrados, se relajó y encontró la excusa perfecta para evitar ser descubierto.
— Estás soñando — susurró Bakugo cerca de su rostro.
Bakugo se giró hacia la lámpara. Debía vestirse, preparar el desayuno y marcharse por más que le costase alejarse de Deku. Se impulsó con las manos hacia el borde de la cama, pero fue retenido. La mano llena de cicatrices de Deku sostuvo el borde de su camiseta impidiéndole marcharse. Bakugo se quedó estático y sorprendido. Él seguía dormido.
— ¿Deku? — susurró confuso. ¿Qué soñaba ese chico para impedirle irse? ¿Tendría alguna pesadilla?
— Kacchan... por favor...
Abrió los ojos ante la sorpresa de escuchar esas palabras. ¿Cuántas veces soñó con poder estar a su lado? Había perdido la cuenta. ¿Podía estar con él? ¿Él querría, si acaso, permanecer a su lado?
Volvió a recostarse y colocó con suavidad la mano en su cuello, acariciando con las yemas de los dedos su nuca. Apenas un sutil contacto que no debería ni siquiera despertarle y entonces, aproximó su rostro al de Deku. Estaba muy cerca de él.
— Shhhh, estoy aquí — susurró Bakugo para intentar mitigar su ausencia en ese sueño que Deku tenía — Estoy a tu lado. Todo está bien.
— Kacchan... — sonrió inocentemente Deku al escuchar esas palabras. Como si todo estuviera bien, su cuerpo se relajó y sus dedos soltaron el agarre a la camiseta de Bakugo.
La respiración de Deku se sentía cerca. Calmándose lentamente, Bakugo aprovechó para acercar su rostro un poco más y tratar de entender qué ocurría. Sus párpados temblaban al igual que sus labios. Tenía miedo. Algo estaba soñando para tenerle en ese estado.
Su rostro acortaba los pocos milímetros hacia sus temblorosos labios. Casi podía rozarlos y, por eso, Bakugo abrió los suyos para poder hacer contacto. Fue en ese momento que todo su mundo se congeló.
— Detente, Kacchan... por favor... ya basta...
¡Una pesadilla! Bakugo abrió los ojos y se paralizó. Era una pesadilla con él. Cerró los párpados con fuerza y rabia. Amaba a ese chico y se había dado cuenta de ello demasiado tarde. Fue un imbécil con él, siempre lo había sido. Era un chico sin quirk que le ponía de mal humor cada vez que iba a ayudarle creyendo que él necesitaba ayuda. En realidad, habría sido fácil decir un "gracias" y hacerle sentir útil pese a que él no necesitase su ayuda, pero jamás lo hizo. Era orgulloso, seguía siéndolo y no permitía recibir ayuda. Deku aún tenía pesadillas con su infancia, todavía recordaba cuando hacía arder su nitroglicerina cerca de él hasta explotarla, las quemaduras y las heridas que le hizo... ¿Cómo iba a poder vivir a su lado con ese recuerdo?
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Redescubriendo el amor (Boku no hero: Baku-Deku-Baku)
FanficResumen: Por una misión, Bakugo y Deku se ven obligados a fingir una relación amorosa, pero las cosas no son tan fáciles. En su convivencia, no sólo resurgirán sus problemas no arreglados, sino futuros problemas que les llevarán a redescubrir sus se...