*55*

46 6 0
                                    


Miranda quería pedir más ayuda pero en ese momento no podía hacerlo, ella lejos de James. Miranda pudo ver qué Lily llegaba peleando para ayudarlos, Miranda noto que tenía el vientre abultado pero no dijo nada al respecto solo siguió pelando. Miranda sintió como su vientre comenzaba a dolerle, Harry estaba retorciéndose del dolor pero no podía parar ahora, ella lanzaba hechizos protectores, pero no sabría cuánto aguantaría.

James estaba un poco alejados de ella pero tenía Lily de apoyo mientras que Miranda no. Miranda intentaba mantenerse de pie y pelear pero el dolor era muy fuerte y su vista comenzaba a nublarse y no sabía cuánto tiempo más iba a poder estar de pie.

Cuando no puedo más mantenerse de pie, se recarga en la pared, y se fue resbalando hasta el suelo, escuchando la voz de James un poco lejos y su vista borrosa no ayudaba mucho, sintió como su collar brillaba dejando que su vientre desaparezca, se levantó rápido y miro que la pelea seguía así que corrió hacia otro lado haciendo que la sigan para que James y Lily tengan tiempo de vencer a esos dos.

James estaba preocupado por su esposa pero Lily se encargaba de tranquilizarlo, ella sabía que su amiga estaría bien. Lily no to que dos personas más se les unieron a James a pelear contra los mortifagos eso la confundió pero después escucho gritos.

—¡James, no! —escucho la voz de una mujer gritar y Lily abrió los ojos con su corazón latiendo rápido.

Lily rápidamente corrió hacia James y vio que aun peleaban, él estaba bien, aún, pero, ¿a quién le gritaron? Se preguntaba ella. Lily vio a un pequeño niño correr rumbo donde estaba la pelea. ¿Quién demonios trae a un niño a la pelea? Se preguntó mentalmente.

Lily corrió directamente hacia el niño mientras peleaba con un mortifago, dándose cuenta que los que les ayudaban eran un pelirrojo y un azabache, pero no pudo verles las cara, ya que su objetivo era el niño, que se detuvo cuando un quinto y sexto mortifago se pusieron en su camino.

—¡¡Desmaius!! —grito al mismo tiempo que otras dos voces más, dejándole ver a una castaña y una pelirroja, ambos traían a unos pequeños en sus brazos. – pero qué demonios

Rápidamente tomo al pequeño mientras llegaban más mortifagos Lily se estaba maldiciendo mentalmente, ellos necesitaban ayuda y a Miranda pero ella se habia ido para darles ventaja pero ahora la necesitaba. Miro que el se aferró a ella, mientras gritaba papá. Supongo que debe ser uno de los que está peleando. Segundos después, los mortifagos empezaron a irse.

—Harry, esto no me huele bien —le dijo el pelirrojo al azabache.

—James —hablo la pelirroja y el niño corrió hacia ella, Lily miro a James, que estaba desconcertado al igual que ella.

Miro de nuevo a los otros dos hombres y le pareció haberlo visto en algún lado hasta que recordó cuando Miranda le mostro un dibujo del chico, Lily lo mire bien, era parecido a James, hasta con lentes, pero sus ojos eran verdes como los de ella, eso la confundió

—Harry —murmuró, pero lo que ella no sabía era que el chico la escucho y la miro sorprendido—. James, tenemos que largarnos de aquí.

—Pero –James no quería irse sin Miranda, se acercó más a ella – no podemos dejar a Miranda

—Ella estará bien, la conoces – Lily lo colmo entonces él asintió con la cabeza

Lily mito a las otras cuatro personas, esperando a que los siguiera y sintió a James tensarse. Lo miro a los ojos, él no sabía porque lo hacía, pero tenían que venir, tenía que venir con ellos, antes de que Voldemort llegara por todos ellos como lo habia hecho antes.

Una Snape diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora