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A la mañana siguiente James se levantó encontrándose con Miranda, se acordó del beso que se dio con su ex mejor amiga y no pudo evitar sonreír al verla. La acerco más a él besando su mejilla haciendo que se mueva. Miranda se comenzó a mover tratando de estar cómoda, se dio la vuelta aferrándose al pecho de James poniéndose más cómoda.

—Despierta Miranda – acaricio las mejillas

—No

—Vamos cariño – al escuchar decir a James eso abrió los ojos encontrándose con los ojos de James – buenos días

—Buenos días – susurro Miranda

James acaricio su mejilla para darle un beso en los labios cosa que Miranda acepto gustosa. Cuando se alejaron ella se levantó parpadeando mirando a su alrededor.

—Vamos

James la tomo de la mano saliendo de la cama para salir de la sala de menesteres y caminar hacia la Torre de astronomía, se sentaron mirando el paisaje mientras se abrazaban.

—¿Sabes? – dijo Miranda mientras apoyaba su cabeza en las piernas de James, se habia alejado dl abrazo para ponerse más cómoda – Creo que podría acostumbrarme a esto.

—Y yo –dijo James mientras le hacía caricias en el pelo.

—Te voy a decir algo pero no te asustes –dijo Miranda mirando las estrellas.

—No me voy a asustar.

—Bien –dijo –a la de tres lo suelto, 1, 2, me gustas.

Si la pelirroja no hubiese estado mirando a las estrellas, se hubiese dado cuenta con el amor que el azabache la miraba.

—¿Te asustaste? –preguntó al no recibir una respuesta.

—En absoluto, tú también me gustas – dijo James conectando la mirada con la de Miranda

—¿No hay un creo?

—No creo que me gustas. Me gustas –declaro –y me di cuenta cuando te vi en los brazos de Alex o Daniel, sentí tantos celos que no pude evitar pensar en ti

—¿Y por qué no me lo dijiste? –preguntó la pelirroja

—No lo sé – confesó James mirando sus manos.

—Ya no te gusta Lily

—No, me di cuenta que no – acaricio sus mejillas

Miranda cerro los ojos sintiendo como la marca en su pecho iba desapareciendo haciéndola relajar y no tener más ese dolor, James beso sus mejillas para después besa sus labios haciéndola sonreír en medio del beso.

—Miranda – ella abrió los ojos –¿Quieres ser mi novia?

—Sí, mil veces sí – dijo parándose y besando a James con cariño – te quiero

—Y yo a ti – beso su mejilla haciendo que cierre los ojos

Pasaron algunos momentos y se fueron directamente hacia el Gran Comedor donde estaban los demás, cuando entraron todos se giraron a verlos, Miranda se iba a sentar con Frank cuando James la atrajo hacia él besando sus labios ganándose una exclamación de parte de los demás.

—Nos vemos cariño – susurro James cerca de sus labios

Miranda se fue a sentar junto a Frank contándole lo que paso mientras James se iba sentando con los chicos contándoles todo sobre lo que paso ayer. Miranda se habia levantado para irse a la biblioteca para poder terminar con su tarea de DCAO junto con Frank.

Los merodeadores se fueron a la biblioteca por orden de Remus pero James tenía que traer algunas cosas así que se fue a la sala común cuando una chica se paró frente a él preguntándole sobre su nueva novia cuando la conversación dio un giro drástico.

—Bueno me gusta más verte con ella, que sufriendo por la estúpida de Evans–dijo la chica sonriéndole dolía pero si James era feliz ella igual lo sería – esa chica es una sabelotodo

—No le digas así a Evans, ¿si?–dijo James con un toque molesto

—Como quieras, Potter, pero si quieres a Snape tendrás que olvidar a Evans por completo–dijo la chica encogiéndose de hombros – si la llegaras lastimar estoy segura de que ella no te perdonara – dijo para después irse

James se fue directo a la biblioteca pensando un rato ¿Qué sentía por Miranda? Le propuso ser su novia pero ¿Qué siente por Lily?
El levanto la vista y vio a Miranda con una sonrisa y ese brillo en sus ojos, su risa resonaba en sus oídos, esa hermosa risa, la cual siempre le levantaba el ánimo, sus hermosos ojos, por los cuales su corazón latía y ni hablar de su cuerpo, ella tenía un cuerpo precioso, sus curvas resaltaban al ponerse pantalones y blusas pegadas, al igual que los vestidos, si fuera por él, ella desde hace años hubiera estado en su cama.

Miranda estaba sonriendo mientras lo miraba y agitaba la mano haciendo derretir su corazón al verla sonreír, James camino hacia ella de manera rápida pero se detuvo al ver como Daniel la abrazaba y besaba su mejilla eso lo hizo enojar, corrió de manera rápida hacia ella, Daniel se fe dejándola sola. James sonrió cuando estuvo al lado de ella, él llevo sus manos a sus mejillas para después inclinarse un poco y plantarle un dulce beso. Al separarse Miranda estaba roja con los ojos cerrados y de la nada se le dibujo una sonrisa tierna, cosa que le pareció a James encantador, ella era encantadora, una chica realmente hermosa y amable. La chica ideal para cualquier hombre,

—¿Cómo esta mi chica hermosa?–pregunto James besando sus mejillas rojas

—¿Tu chica?–pregunto Miranda sonriendo

—Sí, mi chica–dijo James burlón

—Entonces tú eres mi chico – dijo besando sus labios

—Nos alegra que sean novios— dijo Sirius – seremos amigos de nuevo

—Creo que si – dijo Miranda abrazándolos – los extrañe mucho a todos

Sirius estaba aferrada a su amiga tratando de que no se aleje, los demás se unieron al abrazo y se sentían bien, los merodeadores ya estaban unidos de nuevo y nade los legaría.

—Ven, tengo que darte algo – dijo James mirando a Miranda

Los merodeadores junto con sus amiga fueron al lago negro pero no habia nadie, los chicos se quedaron mirando a James y él tomo a Miranda de la cintura pegándola a él e hizo que mirara el cielo. En ese momento aparecieron fuegos artificiales: "¿sería mi novia señorita y futura señora Potter?"

Miranda estaba sorprendida, no sabía que decir. Estaba en shock.

Una Snape diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora