Cap. 14

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Pov. Harry Potter:

Entre y todo estaba desordenado, se notaba que a ella no le gustaba ordenar su habitación.

-¿Una habitación para ti sola?- era de esperarse, es la nieta del director.

-Bueno ya sabes porque- dijo ella entre risas -siéntate donde gustes, yo estaré aquí- se sentó en su cama apoyándose en el espaldar y empezó a escribir en un libro, parecía un diario, me senté a su lado y rápidamente lo cerró, como si escondiera algo ahí.

-¿Qué es eso?- le pregunté intentando tomarlo ella rápidamente alejó el libro de mi.

-Nada- respondió nerviosa -No es de tu incumbencia igualmente- lo escondió debajo de su almohada y destapó la comida que le había traído -Que buen gusto, Potter.

Obviamente tengo buenos gustos, me gusta ella, me encanta, pero ese no era el tema.

-Elegí lo que tenía servido en mi plato el día que me robaste mi comida en el gran comedor.

Rió ante eso -Aun te acuerdas? Me impresionas - dijo ella volviendo su mirada a su plato, empezó a comer a mi lado.

-Claro que me acuerdo, me acuerdo de cada día que pase contigo- expresé con nostalgia notable en mi voz pero eso no pareció ablandar su postura.

-No hagas eso- ordenó ella mirándome amenazadoramente a los ojos.

-¿Que cosa?- inquirí totalmente descolocado, ¿que había hecho ahora?

-Decir cosas como esas, no lo hagas.

-No te estoy mintiendo, t/n, ¿qué te ocurre?- pedí una explicación, me estaba empezando a estresar.

-No sé si eres menso o te haces- dijo ella con una mano en su frente -A ti te gusta desde el año pasado Cho, le dijiste delante de mí que éramos mejores amigos cuando a mi se me notaba lo mucho que me gustabas, la invitaste al baile a ella y cuando viste que te rechazó acudiste a mi como segunda opción. ¿Crees que tienes derecho a hablarme bonito después de haber jugado conmigo de esa manera? No, Potter y he estado intentando no sentir este maldito consquilleo en el estomago cada vez que te tengo cerca pero ¡NO AYUDAS!- término de decir enojada, con la respiración dispareja por haber hablado tan rápido, tanto era su enfado que me daba mas miedo que Hermione. Y eso ya era bastante grave de por si.

-Si está bien, lo admito, me gustaba Cho al principio de el año pasado pero eso fue antes de verte. La invité a ella antes que a ti porque tú venías de ese colegio lleno de clase, con chicos que son muy elegantes y yo solo... soy yo. No sé francés, no uso ropa elegante, no tengo un cabello súper peinado y no huelo a perfume caro todo el día. En cambio tú eres y eras tan hermosa y refinada pero sin dejar de ser increíblemente estupenda, tenía miedo de invitarte y que me rechazaras. El día de la primera prueba cuando me besaste pensé que solo fue de la emoción de ver a tu amigo vivo. El día de la última prueba le dije todo eso a Cho porque no sabía que era lo que tú me hacías sentir, ¡PORQUE NUNCA LO HE SENTIDO POR NADIE!- no le mentí, todo lo que dije era verdad. Nunca había sido tan sincero en mi vida.

-Si no te gusta ella entonces, ¿quien te gusta?- inquirió ella con genuina curiosidad, esa pregunta no era muy Slytherin de su parte.

-¿Acaso no es obvio? Por Merlín, t/n, me gustas tú. Me gustas desde el día que pasaste bailando por esa puerta con tu uniforme incompleto y me lanzaste mariposas negras en la cara. La cara de idiota con la que siempre te miro porque no puedo disimularlo y me delata. Dios, todo Gryffindor sabe que me gustas sin yo siquiera decirlo, ¿y tú no te das cuenta?- la miraba a los ojos mientras decía todo eso. Su mirada se iluminó y podría jurar que se me derrito el corazón solo con verla.

Mariposas negras +18 (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora