Voces Anónimas

10. Sin explicación

Estaba recostada en el sofá de la habitación, cuando de repente miro que Billie mueve un dedo.

-Billie, mi amor.

Me paré lo más rápido que pude y tomé su mano. Estaba despertando.

-Qué pasó? -dijo tratando de levantarse.

-No te levantes, amor, tuvistes un accidente.

-Cómo pasó? -dijo confundido.

-La pelota.

-Ya recordé. -dijo en un tono de rabia.

-Descuida, Billie, llamaré al doctor para que vea tu diagnóstico.

-Ok -dijo tratando de acomodarse.

Fui lo más rápido que pude hacia donde miraba las enfermeras, de repente un señor se atraviesa enfrente de mi.

-Lucía, no lo hagas, no lo soportarías -dijo con una cara de desesperación.

-Quién es usted? -dije confundida

-No quiero verte llorar.

Salí corriendo, fué muy extraño ese encuentro, iba muy apurada hacia recepción que no entendí lo que el señor me había dicho.

Corrí hacia las enfermeras, les avisé que Billie había despertado y de inmediato llamaron al doctor y fueron a la habitación. Me quedé en una silla que estaba fuera de la habitación, mientras revisaban a Billie otra vez.

Recordé el momento de el señor que me había dicho algo, no recordaba muy bien que era, pensaba que ya lo había visto en alguna parte pero no lo podía recordar.

En un momento recordé quién era. Ese señor era el mismisimo Mike!

Era el mismo señor de mi sueño, el que la chica rosa (así le puse a la chica de pelo rosa) me había dicho que se llamaba Mike, sólo que en mi sueño era más macabro. Cuando lo miré a los ojos, lo pude notar triste y desesperado, tenía algo.

No entendía como es que pude verlo fuera de mi sueño, era tan real, como sí fuera una persona de verdad, o tal vez lo era, pero yo lo puedo soñar.

En ese momento tenía muchas dudas, quería que alguien me explicara todo.

De repente aparece un chico a mi lado, se sentó en la silla de a lado mío y me miro fijamente.