Voces Anónimas

59. Hermanos

-Yo me voy. -dice Ed, parandose de la banca.

-No, quédate. -dije agarrando su brazo.

-A quién le hablas? -dice Carlos riéndose.

Ed se río por haberme dejado en ridículo y luego desapareció. Yo me quedé con cara de apenada pero luego me enojé. Ed me había dejado!, y luego me deja en ridículo! que  estúpido es! -pensé.

-Estúpido. -susurré.

-Eh? -dice Carlos.

-No, nada. Por qué mejor no vamos por kelly? Puedes pasar un rato con ella y conocerla, es una niña muy linda. -dije sonriendo.

-Claro, escuche decirte que tienes otra hermana.

-Sí, vamos.

Carlos y yo caminamos hasta la casa hogar. Llegamos y rápido pedí a kelly, claro que salimos con la condición de que la cuidara bien, Kelly accedió rapido porque a ella le encantaba salir y casi siempre, nosotras también salíamos a pasear, las dos solas, para pasar un rato entre hermanas.

Salimos los tres, Kelly no sabía quien era Carlos, nunca lo había visto, hasta parecía incómoda con su presencia, pero luego le expliqué el caso.

-Kelly... el es Carlos, tú hermano.

Carlos le sonríe cortesmente, pero Kelly lo miraba como un extraño el cual no quería conocer.

-Vamos, saludalo Kelly.

-Hola, Kelly. -dice Carlos.

-Hola. -dice tímida.

Me inqué a la altura de Kelly.

-El es nuestro nuevo hermano. -le dije sonriendo.

-Por qué?

-Porque el nos apoyará.

-Es mi hermano?

-Sí, hijo de nuestra mamá.

Carlos se tensó un poco al escuchar lo último que dije, creo que aún no supera ese tema.

-Vamos a comprar helados? -dice Carlos sonriendo.

-Sí! helados! -dije como niña pequeña.

Kelly se río, por lo menos eso era un avance, ya no estaba tan sería y empezaba a caminar a lado de Carlos.

Llegamos a un puesto de nieves que estaba en el parque, compramos los helados y los tres nos sentamos en una banca que estaba a lado de los juegos del parque.

-Lucía! hay que ir a jugar! -dijo Kelly con su helado aún en la mano.

-Y los helados? mira, si quieres yo los cuido y tú vas con Carlos a jugar.

Kelly no se veía muy convencida, pero Carlos la animó para que fuera con el.

-Vamos, Kelly! hay que subirnos a los columpios! -dice Carlos convenciendola de ir.

Kelly me da su helado y accede a ir. Kelly y Carlos empiezan a jugar, los dos corrían por todo el lugar, yo los miraba y me reía de ellos, Carlos se percató de eso y me obligó a ir a jugar.

-Vamos, Lucía!

-No, no tengo ganas. -dije cruzandome de brazos.

-Vamos! -grita Kelly.

Después de que me jalaron de los brazos, por unos segundos, después acepté y los tres corrimos por el parque, subiendonos a todos lo juego, los tres reíamos sin parar.