27. ¿Será amor?

939 37 9
                                    

Llegué de la escuela, fué un día tan ordinario que hasta fue aburrido. Entré a la casa, estaba sola, tal vez mi madre salió con Kelly, por suerte yo traía llaves y pude entrar, cerré la casa y me dirigí a mi habitación, me encerré en el cuarto, hice tarea, luego bajé un rato a la cocina y me hice un sandwich, después subí y me volví a encerrar, miré la hora, apenas eran las 3:00 pm, tenía mucho tiempo libre.

En este momento podría estar con Billie, fumando y besandolo. -dije con lágrimas en los ojos.

Me paré, sequé mis lágrimas y me dirigí a un mueble donde tenía mucho libros, estaba pensado en cual leer, tenía varios nuevos que compré y no los había leído, opté por uno de Lovecraft, amaba sus libros, era otro de mis autores favoritos.

Me dí media vuelta y veo a Ed en el sillón. El corazón me latíó muy rápido, no sabía el porque, yo no estaba enamorada de el, no podía estarlo.

-Hola, lucía.

-Hola, Ed, qué haces aquí?

-Dijiste que querías hablar conmigo más tarde, y ya es más tarde, no?

-Sí, pero, cómo supiste que vivo aquí?

-te seguí desde el colegio.

-Me seguiste?

-Sí, y no te diste cuenta.

-Claro, lo sabía, eres otro de esos fantasmas.

Ed se paró y agarró mi celular que estaba en mi tocador.

-Sí, agarralo, no hay problema. -dije sarcastica.

-Gracias. -dijo, pensado que lo dije encerio, o simplemente ignorando mi sarcasmo.

Me senté en la cama y el enseguida se puso a lado de mi. Puso una canción de mi celular, reprodució la de Welcome to paradise, mientras los dos reíamos.

-Esa canción me recuerda a mi madre. -dije riendo.

Ed sólo río, y volvió a ver el celular.

Estaba nerviosa, Ed estaba demasiado cerca de mi. Estaba leyendo mientras Ed miraba todas las canción que tenía en el celular, sujetaba el libro con mis dos manos, sobre mis piernas, cuando de repente Ed me quita el libro de mis manos y lo lanza por la habitación, luego pone su cabeza sobre mis piernas.

-Amm, sí... yo estaba leyendo eso, sabes?

-Oh, lo siento. -dijo con su mirada en el celular, era como si me hubiera ignorado.

-Cómo que a ti te encanta ignorarme, verdad? -dije un poco enojada.

Se río, sin quitar su mirada del celular, quité su cabeza de mi piernas y me paré por el libro.

-Parece como si nunca hubieras tenido un celular.

-De hecho no. -mencionó.

Crusé mis brazos y lo mire enojada, esperando a que volteara a verme. Voltió y sonrió, se paró e hizo como si fuera a entregarme el celular, estiré mi mano y éste lo quitó enseguida.

-Ups, demasiado lenta. -se ríe

Me quería enojar pero no podía, me ganaba la risa, lo perseguí por toda la habitación tratando de quitarle mi celular reíamos. De pronto Ed se sube al sillón y yo iba detrás de el, Ed cae y caigo con el, caí arriba de su pecho, no podíamos parar de reír, al parecer no le dolió, después de unos segundos nuestras miradas se cruzaron, Ed me miraba fijamente a los ojos,parecía que iba a besarme.

De pronto llega Alex, entra por la ventana y mira a Ed con ojos de desprecio...

Voces AnónimasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora