—Adelante.
Jungkook abrió la puerta después de escuchar la orden del otro lado.
—Hola, buenas tardes —saludó debidamente aún cuando eran conocidos.
—¡Hombre! ¿Cómo estás? Hace mucho que no te veía, ven a saludar a este viejo amigo —y con una sonrisa, el psicólogo se levantó y rodeo su escritorio.
Ambos alfas se abrazaron con fervor y dejaron evidente que la lejanía que últimamente habían tenido entre ellos no era impedimento para su gran amistad.
—Ahh Namjoon~ —suspiró aliviado Jeon mientras se separaba del abrazo y estrechaba su mano con la del más alto.
—Ahh Jungkook~ —le imitó —que grata sorpresa, Jin estará contento de saber que nos vimos, deberías darte una vuelta por la casa más seguido tipo, se te extraña —y ambos rieron fraternalmente.
Hacía tanto tiempo que no sabían, más exactamente al menos una década.
A Jungkook le encantaba reunirse con Namjoon porque con él podía ser él mismo sin las preocupaciones de ser el “Gran Alfa” como le llamaban, ni ser acosado por un instante o ser juzgado por equivocarse; siempre podría contar con Namjoon en cualquier circunstancia porque sabía que siempre estaría para él.—Pero ¿Qué te trae por aquí? —la preocupación se pintó inmediatamente en la pregunta —supongo que solo pasaste a ver a un viejo amigo, pero ¿Por qué estarías en un hospital? ¿Te sucede algo? ¿Te encuentras bien? ¿Necesitas ayuda?
Jungkook rió y tomó por los hombros al otro Alfa en un intento de tranquilizarlo.
—Calma hombre, Es cierto que vengo a ver a mi amigo pero también tengo otra cosa que hablar contigo.
—¿Y eso? Pasa, pasa, toma asiento —Namjoon volvió a su lugar detrás del escritorio mientras Jungkook tomaba asiento frente a él.
—¿No vas a tener consultas o algo así? Es que lo que te voy a explicar es muy importante y requiero total atención y disposición de tiempo —y cuando Namjoon negó entonces fue turno de Jungkook para hablar de nuevo —bien.
Quiero comenzar por decirte que lo encontré.—¿Encontrar? ¿A quién? —Namjoon parecía perdido totalmente.
—A mi Omega —susurro embelesado el Alfa mientras captaba la hilarante reacción del contrario —es... hermoso y atento, amable, tierno, risueño, sus ojos son como dos piedras preciosas que necesito cuidar, tiene la sonrisa más hermosa que he visto en todos mis años de existencia y su aroma es tan adictivo... Oh Namjoon~ él es tan... Perfecto.
—Wow amigo, y decir que parecía hace unas décadas que vivirías recluso del trabajo nada más.
Namjoon estaba impresionado con lo que escuchaba salir de la boca de su amigo y es que no comprendía como alguien como Jungkook: tan serio, enigmático, misterioso, podría llegar a tener como pareja a alguien con la descripción que había dado. Es más, ni siquiera comprendía cómo es que Jungkook, siendo como era, podría haber llegado a tener una pareja.
—Lo sé, hace un tiempo atrás quizás me hubiera rendido, pero ahora... Ahora todo es tan distinto.
Namjoon incluso podría jurar que alcanzaba a notar un sonrojo en las mejillas del Alfa.
—Bueno, pues me alegra mucho que hayas encontrado a tu Omega predestinado amigo, me es muy grato saber que al fin encontraste alguien que pueda cuidar de ti...
—Gracias~
—Pero eso no explica el por qué estás en un hospital.
—Oh, vaya, pues esa es la otra parte de la moneda —Jungkook rascó su cuello nervioso.

ESTÁS LEYENDO
Mi perfecto Omega
De Todo-¿Y por qué yo? -¿Y por qué no? -Pues míreme, no creo alcanzar la expectativa de un esposo Omega ejemplar... -Eres lo más bello que he visto en mis jodidos siglos de vida, lo más hermoso y lo más perfecto. -... -Mírame Omega. Eres perfecto y aunqu...