Cap. 57

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  Taehyung.

  A la mañana siguiente falte a clases.

  Después de lo que había sucedido ni siquiera había sido capaz de cerrar los ojos.

  Olía a él.  Todo olía jodidamente a él.

  Y oh vaya, como me encantaba.

  Quizás podía ser masoquista, ya que después de todo no dejaba de dolerme lo que había pasado. Si, así es, yo Kim Taehyung había sido herido por Jeon Jungkook, un chico del que dije nunca iba a enamorarme.

  Vale, había fallado lo admito. Pero no me arrepiento.

  Y siento que en ningún momento podría hacerlo, aunque admitirlo en voz alta sería otra cosa.

  Habían dos razones por las que no había asistido a clases.

  Uno: No quería ver a Jungkook, ya que, no había mentido en lo que le había dicho, y se que si lo veía de nuevo, querría volver a repetir lo de ayer, y me arrepentiria luego.

  Y dos: SeungCheol.

  Ayer había querido mantener la postura frente a él, ya que sabía perfectamente quien era y sabía a que venía. Así que no perdí mi tiempo y busque la tarjeta en mi chaqueta agendando una cita para vernos, en un café cercano.

  Como había esperado, su reacción había sido la misma de siempre, tranquila y amable, como si hubiera esperado esa respuesta de mi parte.

  Cerré con fuerza el cajón de mi ropero y solté una carcajada baja al pensar en ello.

  —Siempre pensando que tiene todo bajo control. —murmure tomando mi celular del buro.

  Salí de casa despidiéndome de Hyuna quien tan sólo me agitó la mano mientras miraba el televisor y comía cereales.

  Subí a mi auto y conducir hasta la cafetería en la que estábamos quedando, no pasó mucho tiempo en que llegue, estacione en un lugar algo vacío y baje de este.

  Abrí la puerta del café que tenía pinta de ser muy concurrido ya que habían bastantes personas en el lugar, el olor de café en el lugar me agradó. Mire por las mesas para ver si había llegado ya, y no tarde mucho en encontrarlo, levanto una mano llamando mi atención, tenía una sonrisa en los labios y su característico traje formal.

Me adelanté con un gesto despreocupado y me senté frente a él olvidando las formalidades.

  —Vaya vaya, quien diría que me encontraría contigo después de todo el escándalo que has armado. —empezó con una sonrisa sacarrona en los labios, tomó su taza de café— Siento como si estuviera hablando con una celebridad.

  Sin poder evitarlo solté un bufido, mire un café que igual estaba frente a mi, lo more enarcando una ceja.

  —Me tome la libertad de pedir por los dos. —señaló haciendome una seña de que bebiese, cosa que ignore.

  —Vamos al punto, ¿qué quieres? —recargue mis antebrazos en la mesa empujando el café al centro de la mesa.

  Tomó un pequeño sorbo de su café y cruzó la piernas mirandome.

  —Okay, vayamos al punto. —concedió mientras dejaba la taza de nuevo en la mesa.— me supongo que sabes que me encuentro muy bien informado de lo que pasa.

  —Y supones muy bien, ya es normal para mi saber que como no tienes una vida, siempre acudes a fijarte en la mía. —recargue la espalda en mi asiento ladeando la cabeza mirándolo.

Solo una noche. | vkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora