Solo una noche. | vkook

Cap. 42

Kim Taehyung.

  No había tardado en estacionarme frente a mi casa. La lluvia había aminorardo siendo ahora sólo una brisa tranquila que golpeteaba el techo de el auto con tranquilidad, aún seguíamos Jungkook y yo algo mojados. No habíamos vuelto a hablar desde que habíamos partido.

  El silencio apesar de que en cualquier otra ocasión pudo ser incómodo, en ese momento no lo llego a ser. El silencio, sólo había sido eso, silencio. Cómo si aquella pared de incomodidad que antes estaba frente a nosotros ahora hubiera aminorado por el peso de nuestros pensamientos. Estábamos tan dentro de ellos que nos había importado poco aquel denso silencio.

  Y lo había preferido así.

  Fuera de cualquier cosa, me gustaba ese silencio, me daba la libertad de pensar las cosas de manera tranquila, sin apuro, siendo meticuloso con cada cosa que hiciera.

  —Llegamos. —afirme lo obvio mientras apagaba el motor.

  Note por el rabillo del ojo cómo Jungkook inhalaba lentamente cómo tratando de tranquilizarse así mismo. Sonreí casi imperceptiblemente mientras me quitaba el cinturón de seguridad.

  —Vamos dentro, te resfriaras con toda esa ropa mojada. —y baje del auto.

  Pero apesar de bajar, pude notar un pequeño sonrojo en sus mejillas blancas haciendo que fruncira el ceño mientras rodeaba el auto, ¿por qué se sonrojaba?

  Abrí para el cómo todo un caballero ayudándole a bajar.

  Su cabello aún se pegaba a los bordes de su rostro y finas gotas de agua caían de este, era agradable de ver, realmente Jungkook era precioso.

  Los dos corrimos hacia dentro del edificio para evitar mojarnos aún más. Al llegar el portero que estaba limpiando el piso con un trapero, me dio una mirada de muerte cuándo me vio pasar. Molesto tomo las cosas y entró al cuarto de mantenimiento soltando cosas como "más personas ensuciando mi suelo" o "asquerosos niños".

  Fuimos directo al elevador mientras Jungkook miraba todo con detenimiento y con un destello en los ojos de asombro.

  —¿En serio vives aquí? —me pregunto después de que tocará el botón al piso al que íbamos.

  Había olvidado que el nunca había venido aquí.

  —Es mejor que vivir con mis padres. —me escogí de hombros restandole importancia.

  Las puertas del elevador se abrieron en el siguiente piso para de nuevo, volver a cerrarse.

  —¿Es malo vivir con ellos? —su pregunta no me sorprendió para nada, sabía que al soltar algo así, la curiosidad se dispararía en él.

  Cosa que ya sabía de sobra que compartían Jungkook y su hermana era que eran muy curiosos.

  Guarde silencio meditando la pregunta, ¿Era malo? Bueno, no lo era realmente, más en si era incómodo, aunque su perspectiva de tener hijos perfectos me molestaba, no lo consideraba exactamente "malo".

  Pensó que no contestaría ya que cuando hable de vuelta, parecía estar reprendiendose internamente por preguntar. Jungkook era muy fácil de leer.

  —No malo, yo diría, incómodo.

  —¿Incómodo? —podía sentir su curiosidad burbujeando en él.

  Lo pensé un momento.

  —Son personas, un tanto... mhmm, extravagantes. —hice una pequeña mueca con los labios—. Sentía que si seguía quedándome con ellos, los terminaría odiando.