Se lanzó a su sofá después de alimentar a sus exigentes mascotas. Había tomado un largo baño caliente y obligó a su mente a permanecer en blanco el máximo tiempo posible.
Pero ahora, con la chimenea ardiendo detrás de el, un solo pensamiento le visita y le genera escalofríos.
Tony.
Tony besando su espalda. Tony acariciando sus mejillas mientras le ve absorto. Tony jugando con el dorso de su mano y recorriendo con devoción los costados de su abdomen.
Recuerda que Tony jugó con su cabello hasta que se quedo dormido. Sus parpados pesaban y la mirada de Tony no lo dejaba, lo admiró cada minuto que duró la noche y un poco más.
Sube sus piernas al sofá, las abraza y coloca su cabeza sobre sus rodillas. Sigue recordando como Tony le tocó, besó y amo.
- Mierda.- musita. Estaba jodido. Realmente jodido.
Después del correo que anunciaba su admisión, se comunicaron con él. Le informaron que su pasantía iniciaba en cinco semanas y que tenía tiempo suficiente para dejar todo en orden y volar a París, Francia.
Estaba increíblemente feliz y orgulloso de sí mismo, de miles de personas fue el único con el IQ lo suficientemente alto y necesario para ser parte de tan importante pasantía.
Aún no lo cree, no cree que él tenga un IQ alto. No después de ceder ante la persona que más traumas y problemas le ha causado. No puede ser posible que siga ridiéndose ante un par de ojos castaños y una sonrisa traviesa.
Ni siquiera entiende porqué lo hizo, es decir, entiende la tremenda tensión sexual que comparten, pero de haber tensión sexual a resolverla hay un paso gigante.
Y ni siquiera pensó en ese paso cuando los labios de Tony atacaban su cuello. A lo mejor fue la falta de sexo de todos esos meses, desde que Steve cedió el divorcio, desde antes de eso, no había tenido nada acción.
Pero, si fuera por deseo sexual, lo hubiera hecho con Gwen, la chica prácticamente se le desnudo en las narices y él le brindo una bata seca y le preparo un baño caliente.
O pudo haberlo hecho con Tom, el encargado de la enorme cafetería del MIT que siempre le mandaba un café a medio día y un corazón rodeando su nombre.
Muerde su labio, su mente trabaja a mil kilómetros por hora, haciendo un control de daños y evaluando las acciones a tomar. Porque Tony no lo tomo como un desahogo sexual, no.
Tony dijo que lo quería en su vida de una vez por todas. Pero eso no tiene sentido para Peter, no es como tener sexo sea borrón y cuenta nueva. Las cosas no funcionan.
Tendría que haber amor, realmente amor, para poder iniciar de nuevo. Pero no hay amor, ya no le odia, pero ¿amarlo? Eso sería totalmente ridículo.
No puede seguir amando después de tanto tiempo y tanto daño, es absurdo, es ilógico e irónico. Peter bufa, su cerebro le está castigando, sin duda.
- ¿Estás bien?- brinca en el sofá cuando la voz de Tony llena la sala.- Llevó parado tres minutos aquí y no te has dado cuenta.
- ¡Sí!- se gira y enfrenta la realidad.- Lo siento, estoy algo cansado.
Tony lleva un jeans negro, una camisa rosa y una sudadera negra. Carga una bolsa de papel y Habichuela le mueve la cola con entusiasmo.
- Umm, habíamos quedado vernos para cenar.- el millonario no se mueve.- ¿Lo recuerdas?
Peter no tiene ni la mínima idea de cómo comportarse. Todo eso parece un mal chiste y tiene ganas de llorar.
Se supone que habían dejado las cosas claras aquella tarde en el hospital. Él le había dicho a Tony que no le quería más en su vida y el millonario había respetado eso.
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Una historia sin final. [STARKER]
FanfictionLas mentiras de Tony y el orgullo herido de Peter traen consecuencias: un matrimonio por conveniencia y las ganas de vengarse. Peter esperaba no volver a ver nunca más al mentiroso y egoísta Tony Stark. Pero la vida no te da lo quieres. Tony en ca...