[Completa]-¿SIGUES SIENDO MI FUCKBOY? 🔥

29.🏟-Mateo.

Necesitaba alejarme de ella para poder pensar en mi próximo movimiento y en como pasar desapercibido con mi padre. 

Alejamiento que solo duró dos malditos días en los que me comieron las ansias y las ganas de sacarla a rastras de su casa para secuestrarla en mi apartamento.

Pasó casi todos los días a mi lado mientras me recuperaba de ese esfuerzo que hice para recordar, disfruté del silencio que había mientras ella estaba a mi lado pero cuando finalmente me recuperé tenía que abrir mi boca para decirle que debía pensar las cosas.

"¿En qué mierda debía pensar si ya tenía claro lo que haría cuando saliera de la cama de hospital?"

Para colmo de males, Víctor me ha estado vigilando como si fuera un niño pequeño.

Sé que a él, a Florence y a Violeta los he asustado con esto pero ninguno entiende lo desesperante que es haber olvidado algo tan importante como lo es la chica a la que amo.

Nadie entiende lo que es tener de frente a alguien con quien posiblemente se ha pasado la mejor historia de tu puta vida y no poder recordarlo.

No saben lo que es sentir esa emoción que posiblemente la otra persona siente cuando me ve o esa sensación de que el corazón saldrá disparado del pecho cuando está cerca quien amas.

Ninguno lo sabrá porque a ninguno le inyectaron el puto suero del olvido por desesperación.

Ninguno entiende lo que fue ver a mi madre de lejos, llorando desconsolada frente a una tumba vacía.

"Ninguno sabe nada..."

~○~
Me debo contener lo más que puedo para no salir corriendo hacia donde se encuentra mi madre y abrazarla.

La rabia y la impotencia van agarradas de la mano pero la razón me grita que no debo dejar que me vea.

La lluvia parece querer hacer su acto de presencia mientras ella mira la tumba donde se supone que estoy enterrado pero yo no puedo acercarme a cubrirla.

-Mateo...-Víctor es quien me impide acercarme porque me mantiene sujeto con fuerza para ocultarme tras el árbol viejo del cementerio y así evitar que me vea.
-Víctor, por lo que más quieras...-intento soltarme pero es inútil.-quizá si le digo que no revele que estoy vivo, yo pueda...
-Así no funciona una coartada, Mateo...-me dice con la voz entrecortada por la fuerza que hace al detenerme.
-Necesito verla, abrazarla y tenerla a mi lado...-me pega contra el árbol y me sostiene firmemente para que no me mueva.
-Y yo a Florence pero no lo haré porque tú madre vive en mi casa, con ellos y ahora me odia por haberte matado, así que si yo debo contenerme para no ir a mi casa, tú también lo harás...-si tan solo recordara porque verga vive mi madre con ellos podría buscar otra solución pero no lo sé.-sé que estás confundido y estresado por no recordar una mierda pero debes calmarte un poco.
-Víctor.....
-Aceptaste las consecuencias de esto en cuanto dejaste que te inyectara el suero, Mateo, ya es tarde para echarte para atrás...-dejo de forzar y él me suelta lentamente.
-En mi puta vida habría aceptado algo así por pura casualidad, así que dime ¿qué ganaba a cambio de mi muerte? ¿Qué sucedió en mi ausencia y por qué para ti es tan importante?
-Ganamos la libertad de todos...-me alegró en el momento saber que lo había hecho por un bien mayor pero esa alegría no duró mucho.
~○~

Dos días duró mi alejamiento porque en esos dos días, me di cuenta de que, aunque no recordaba nuestra historia, aunque teníamos a un maldito siguiéndonos, aunque el miedo me estaba comiendo vivo, algo en mi interior me gritaba que si me alejaba de ella sería mi fin.

"Debes aclarar tu puta cabeza ya o la perderás para siempre..."

Caminé de un lado a otro en mi apartamento mientras mi cabeza me gritaba lo que debía hacer.

-Ya la perdí...-la perdí en cuanto la olvidé y ahora la volví a perder en el hospital cuando le dije que debía pensar las cosas.

Sé que muy adentro de sí misma, ella esperó por mí, a pesar de que sabía que estaba "muerto", ella esperó por mí y ahora la he bajado de la nube en cuanto le dije eso en el hospital.

"Que maldito..."

El sonido de las gotas de lluvia contra la ventana detrás del piano me hace volver a la tierra lentamente, al recuerdo de ella frente al piano, a sus lágrimas desconsoladas y coléricas.

"Deseaba acercarme pero no podía..."

Estaba tocando Skinny Love, una de las canciones más jodidamente tristes de la historia y sus irreconocibles gemidos se escuchaban, a pesar de la melodía desgarradora de las teclas, por todo este lugar pero yo no pude acercarme hasta que terminó la canción.

Estaba llorando mientras tocaba la canción más triste de la puta historia y sé de sobra que no era por la canción.

Tres segundos me tomó entender que lloraba por todo lo que sucedía conmigo y por todo lo que no sucedía, por todo lo que mi presencia la hacía sentir y la impotencia de no poder cambiar lo sucedido.

La he destruido hasta los cimientos y casi creo que no es la primera vez que lo he hecho.

Algo me dice que la he destruido anteriormente pero no sé exactamente con qué o como.

"Será mejor no presionar para averiguar..."

El sonido de la puerta me saca del nudo existencial en mi cabeza y me trae nuevamente hacia la tierra.

Me acerco lentamente al pedazo de madera y abro como si quien estuviera al otro lado fuera mi enemigo mortal.

-Mateo...-dice Dylan casi sin aliento.
-Dylan...-digo con voz neutra.-¿qué haces aquí?...-ríe con exasperación ante mi pregunta.
-Yo soy quien debería preguntar eso cabrón...-eso me toma completamente desprevenido.-¿qué mierda pasa por tu cabeza para dejar ir por cuarta o tercera o milésima vez a lo único real en tu vida?
-Si vienes a charlar sobre tu hermana, pierdes el tiempo...-hago el intento de cerrar pero su pie me lo impide.-vamos Dylan...-empuja la puerta con la mano para abrirla aún más y que pueda verlo a la cara.
-Sé que no recuerdas una mierda, Mateo y créeme que no te culpo por ello...-hay algo en su rostro que lo logro descifrar.-pero tú no sabes lo cansado, estresado y asustado que estuve en este tiempo en el que mi hermana creyó que estabas muerto...-trago una roca de saliva ante el millón de ideas que me vienen a la cabeza.-tú no sabes lo enfermo, cansado y desgarrador que es ver cada día, de cada semana, como ella pedía a gritos poder morir para irse contigo...-mi corazón se quiebra pedazo a pedazo.-era como si su vida se hubiera apagado y el alma se hubiera escapado de su cuerpo...-giro mi rostro para limpiar mi mejilla y evitar que vea la lágrima que ha descendido.-mi pequeña hermana me pedía a mí que la dejara morir para irse contigo...-ya no puedo evitar que me vea llorar.-pero luego apareciste con vida y ella estaba viva también...-se acerca y me pone una mano sobre el hombro.-ella revivió,  Mateo y fue todo porque estabas vivo...-alza el paraguas que lleva en la mano y me lo ofrece.-enfrenta tu miedo con ella a tu lado o te prometo que te arrepentirás para toda la vida el haberla dejado nuevamente...-sujeto el paraguas y lo miro.-ella fue quien te sacó de la oscuridad y lo hará todas la veces que sea necesario porque te ama a más no poder...-me sonríe ligeramente antes de alejarse un poco.-espérala afuera con el paraguas...-debo tener una cara de confusión porque ríe por lo bajo antes de explicarme.-la muy terca se fue sin paraguas al supermercado...-eso me arranca una risa.-ve  y no la dejes ir...-asiento con la cabeza y me acerco para abrazarlo.
-Gracias hermano...-me alejo de él lentamente y empiezo a correr hacia la salida.

"Ella era la respuesta a todo.
No me había dado cuenta de que hemos sufrido por igual, hemos llorado buscando una respuesta a todo esto y hemos sentido miedo por lo que no sabemos pero siempre hemos sido la respuesta del otro.
Ella volvió a la vida en cuanto supo que estaba vivo y yo volví a la vida en cuanto la vi; ambos necesitábamos la fuente de nuestra vida para estar bien y así como yo soy la suya, ella es la mía.
Siempre ha sido la mía y sin importar lo que no recuerde, lo fue desde mucho antes de que olvidara.
Nuestra historia tendrá un nuevo rumbo, tendrá nuevos recuerdos y nuevos lugares.
Y sé que sin importar qué, estaremos juntos porque ella es la persona que amo y que siempre he amado, con o sin recuerdos.
Ella es mi pieza faltante.
Mi otra mitad.
La que comparte su vida conmigo.
Mi persona.
El amor de mi vida."