[Completa]-¿SIGUES SIENDO MI FUCKBOY? 🔥

20.🦔

La rabia que emana de Mateo es abrumadora y casi creo que contagiosa porque su compañero esta furioso.

-¿Dejaste escapar al sospechoso, Durrell?...-y esa es la gota que derrama el vaso de la paciencia de Mateo Durrell.
-¿Porque no te vas a la mierda en lugar de decir cosas sin sentido?...-le escupe Mateo con rabia, al tiempo que me suelta la mano con brusquedad y se pone a caminar de un lado a otro como gallina en corral.-estaba ahí cuando nos vinimos, yo lo vi....
-¿Tú lo viste? ¿Con esos ojos inservibles pudiste verlo?...-gira con brusquedad para mirar a su compañero y comienza a caminar hacia él.
-¿Qué mierda has dicho?...-me pongo en medio camino, con la mirada fija en él y los nervios comiendo mis entrañas.
-De nada sirve el testimonio de un ciego, James...-los ojos de Mateo bajan hasta clavarse en los míos y la rabia parece bajar lentamente.
-Ella lo vio...-dice al tiempo que desvía la mirada hacia su compañero.-¿es otra ciega?
-Violeta...-giro lentamente para mirarlo.-¿viste a ese chico tirado en la acera?
-Sí, estaba malherido y apenas respiraba...-se acerca lo suficiente para poder escuchar mejor mis palabras.
-¿Puedes describirme como lo hirieron?...-le da una mirada de odio a Mateo y enciende la grabadora que tiene en su mano.
-Ese hombre llamado Joe lo atacó primero con una botella de vidrio que estampó contra su cabeza y luego lo golpeó cuando cayó al suelo, varias veces en el rostro, en el estómago y lo dejó tirado.
-¿Como te pasó eso en la cara?...-debo tener una cara de confusión ahora mismo porque Dominick continúa de inmediato.-tienes cortes...-alzo una mano para tocarme la cara pero Mateo me la sujeta y me detiene a medio centímetro de mi mejilla.
-No toques hasta ver si tienes vidrios ahí o no...-asiento en respuesta y bajo la mano pero él en lugar de soltarla, la mantiene sujeta con firmeza y casi creo que con necesidad.
-¿Qué hizo el hombre después de dejar a Jonas en el suelo?...-Mateo aprieta la mandíbula con rabia.
-Vino hacia mí...-la mirada de Dominick se clava en Mateo.-quería tocarme o quizá violarme ahí mismo...-él asiente en respuesta y baja la mirada al suelo.-James me salvó...-clava sus ojos nuevamente en mi y asiente ligeramente.
-Agaradezco tu cooperación, Violeta...-le da una rápida mirada a Mateo y luego se encamina hacia el auto para irse.

Toda esta duda, estos dolores de cabeza y rabia acumulada me provocarán un infarto si Mateo no comienza a sujetar los cabos sueltos.

Una vez que su compañero se ha ido, me hace la señal para que continuemos el camino.

-¿Vas a decirme que sucede aquí?...-le digo sin mirarlo.
-Aquí no...-las aceras empiezan a estar llenas de gente y sinceramente lo agradezco.
-No entiendo una mierda, Mateo.
-Si soy honesto, yo tampoco entiendo nada pero sé que tiene que ver con mi padre...-freno de golpe y lo miro.
-¿Tu...Tu padre?...-la sola mención de ese hombre me da terror.
-Creo que sabe que estoy vivo y que nuevamente estamos juntos...-mi sangre baja su ritmo habitual y el calor abandona mi cuerpo.
-¿Cómo lo sabes?
-Realmente no puedo hablar de esto aquí, Violeta...-dice mirando a todos lados.
-¿Entonces quieres hablar de tu novia?...-pone los ojos en blanco y aprieta la mandíbula.
-¿En serio, Buffy?
-No me llames así...-le escupo con rabia.-y no vayas a tapar nada porque te vi besandola...-susurro para que nadie me escuche.
-No es lo que parece, Violeta...-me dice con rabia.
-¿No intercambiabas saliva con ella?
-Me refiero a que no la besé porque quisiera, necesitaba hacerlo por otro motivo.
-¿El motivo de saciar tus deseos carnales?
-¿Y eso que mierda significa?...-bajo la mirada rápidamente hacia su pantalón y la clavo nuevamente en sus ojos.-¿acaso crees que la besé porque me excitaba esa chica de alguna forma?
-¿Quieres callarte?...-mi asco sube por mi garganta rápidamente o quizá no es el asco.-no puede ser...-giro rápidamente y dejo que el vómito caiga en el caño.
-Puta madre...-sostiene mi cabello con una mano mientras la otra sube y baja por mi espalda con delicadeza.
-Esto es tu...-más vómito interrumpe mis palabras.-culpa...-siento tanta repulsión ahora mismo.
-Solo deja que salga todo, ¿quieres?...-ni su rostro ni su voz dejan ver algún atisbo de asco o algo parecido.
-¿Acaso no te da asco?...-digo cuando ya mis líquidos gástricos han salido por completo.
-Te conozco de toda la vida, Violeta...-me da un pañuelo que llevaba en su bolsa del pantalón para limpiarme la boca.-no existe una sola cosa que me haya dado asco de ti en todos los años que llevo de conocerte y créeme que no empezaré ahora con toda la bilis que has dejado ahí...-eso me saca una risa.-toma...-me ofrece un chicle y yo lo tomo gustosa.
-Te lo agradezco...-asiente mientras me regala una sonrisa diminuta.
-Ahora guíame...-me ofrece su brazo para que meta el mío en el agujero que se ha creado pero ya no puedo seguir reprimiendo los impulsos de mi corazón, por lo que una vez que he puesto mi mano en su antebrazo, arrastro la mano hasta que llego a su mano y la envuelvo con la mía.

No parece poner resistencia ni incomodidad ante mi acto diminuto de mi amor latente hacia él.

Seguimos caminando hasta que llegamos a la entrada del metro que parece estar vacía.

Su mano me da cierto valor para entrar a los lugares en los que definitivamente no me atrevería a entrar sola.

Creo que lo mejor de todo es que no me suelta ni disminuye la firmeza con la que sostiene mi diminuta mano.

Tomamos asiento y el metro comienza a moverse con rumbo hacia nuestro hogar.

Podría decir que es pasada la media noche porque el sueño me esta dominando a tal grado que mis ojos se cierran sin que pueda frenarlos y eso solo me pasa a esa hora exactamente.

-Creo que...-digo en un susurro antes de caer sobre su cómodo hombro.-perdona...-acuesta su mejilla en mi cabeza con mucha delicadeza.
-Yo te cuido...-y eso es lo último que escuché esa noche de montaña rusa emocional junto al chico que amo.