43.🥶-Mateo

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El ruido en mi cabeza es como el de un martillo enorme que pega y pega contra un pequeño e indefenso clavo.

Sostengo la perilla de la puerta con fuerza mientras la imagen de mis pesadillas está de pie, al otro lado del umbral de mi puerta, con su mirada fija en mi y el odio saliéndole por los poros.

Escucho los pasos de ella acercándose hacia donde estoy y mi sistema de inmediato se pone alerta para colocarme frente a ella por si este imbécil planea hacerle algo.

"Deja de temblar como un puto chihuahua y enfrentalo ahora..."

Cierro las manos en puños y presiono lo más que puedo para que el dolor en mis palmas controle el temblor que me causa su presencia aquí.

Me dispongo a decir algo cuando comienza a caminar hacia mi con ese odio latente en sus ojos azules.

Mis pies empiezan a retroceder poco a poco, a medida que él entra en mi hogar.

"Me he jodido..."

-Así que...-su voz hace que se abra un agujero en mi estómago.-sí estás vivo...-se detiene a unos dos o tres pasos de mi y sonríe.-hijo...-ruego al cielo que Violeta se quede donde esta y no se acerque a mi.
-¿Quién le dijo dónde encontrarme?...-su mirada examina el sitio.
-El incompetente al que puse como espía de la pequeña alimaña a la que odio con todas mis fuerzas...-clava sus ojos nuevamente en mi.-aparte de ti...-mis uñas están perforando la piel de mis palmas pero no me interesa.-he de admitir que me siento anonado por tu astucia...-dice mientras camina hacia la ventana tras el piano.-en todos estos años me ocultaste ese lado macabro que creí que era inexistente en ti...-la suave mano de Violeta se aferra a mi brazo.-Violeta Moore...-dice mientras aprieta una tecla.-¿cómo están tus padres, querida mía?...-la sostengo por la cintura cuando la veo hacer el intento de alejarse de mi.-yo diría que bastante muertos...-toca otra tecla más grave.-te sugiero que bajes el cuchillo antes de que te vuelen la tapa de la cabeza...-con su mano libre, señala con un dedo hacia la ventana de la cocina.-te están apuntando directamente a la cabeza...-en cuanto clavo la mirada en ella, mi sangre se hiela de repente y todo por el punto rojo que brilla en su cabeza.
-¿Qué mierda quiere?...-le escupo con furia.
-Deseo entender...-aprieta otra tecla antes de girar para mirarnos.
-¿Qué cosa?...-toma asiento en el pequeño banco del piano y coloca una pierna sobre la otra.
-¿Qué te impulsó para engañarme?...-este idiota solo me tortura para darle respuestas que no tengo porque no recuerdo una madre.
-El deseo de verlo muerto...-digo sin pizca de remordimiento.
-Pues no lo estoy, Mateo, ¿o sí?
-No pero pronto lo estará...-dice ella con rabia.
-Y debo imaginar que serás tú quien me mate...-le dice en tono de burla.
-No...-clava sus ojos nuevamente en mi.-lo haré yo...-ríe ligeramente mientras asiente con la cabeza.
-Esa línea sonó muy heroica para alguien que no es mas que un gran cobarde, ¿no lo crees?
-Usted no sabe una mierda...-él no despega sus ojos cafés de mi ante las palabras punzantes de ella.
-¿No le dijiste por qué motivo maté a sus padres?...-cierro los ojos con fuerza y solo espero la bomba que está a punto de tirarme.-¡Ah!...-los abro lentamente y los clavo en él nuevamente.-olvidé que no lo recuerdas...-eso me baja la sangre a los pies.

Estoy cien por ciento seguro de que el maldito de Jonas no sabía nada sobre mi condición porque el único que podría decirle era su hermano pero no es posible que Dominick se lo haya dicho porque no sabía quién era yo en ese momento.
Entonces....¿Quién se lo ha dicho?

Ríe ligeramente mientras niega lentamente con la cabeza y sé que es por mi expresión incrédula.

-¿De qué habla?...-debo disimularlo o perderé esto.
-Vamos hijo...-la sonrisa se borra de sus labios y el odio aumenta en su expresión.-ya no puedes engañarme más...-conozco esa mirada perfectamente.
-¿Quién se lo dijo?...-siento la mirada de Violeta sobre mi.
-El topo que tengo escondido en la agencia en la que trabajas...-me cago en todo.-debo imaginar que creías que podrías derrotarme...-clavo la mirada en ella.-pero para tu desgracia...-clavo la mirada nuevamente en él y el hielo cae sobre mí cuando lo veo alzar un arma en mi dirección.-siempre iré un paso adelante de ti...-ella no duda ni un instante en colocarse frente a mi para defenderme del camino que entabla la pistola que me apunta.
-¿Sabe lo que veo en usted, señor Durrell?...-eso parece que lo toma desprevenido.-miedo latente...-ante sus palabras, él frunce el ceño con latente confusión.
-¿Miedo? ¿Crees que dudaré en dispararte?...-le pregunta con mucha arrogancia.
-¡Oh no! No me cabe duda de que podría apretar el gatillo para matarme ahora mismo...-no sé que demonios planea en este momento pero solo logrará que le disparen.
-¿Entonces a qué exactamente le tengo miedo?...-ella se hace un poco hacia un lado y me señala con un dedo.
-A él...-ahora entiendo lo que está haciendo.
-¿A mi cobarde hijo?...-pregunta mi padre con la ceja levantada.
-¿Es realmente un cobarde?...-su tono de voz es inocente.
-De pies a cabeza...-dice él levantándose lentamente del banco.
-Entonces...-ella es increíble, siempre lo he sabido pero hoy me lo ha dejado claro.-¿por qué guardó su distancia cuando entró?...-lo está provocando.-¿por qué no le disparó usted mismo en el ring ese día? O, ¿por qué envía a otros a hacer el trabajo sucio cuando es usted el que desea matarlo?...-me arranca una sonrisa la valentía que tiene.
-¿Cuál es tu punto niña?...-dice él con rabia.
-Usted le teme a ese monstruo que habita en Mateo y por eso lo intentó acabar cuando éste sólo era un pequeño...-mi padre disimula muy bien sus verdaderos sentimientos pero conmigo es inútil que lo haga.-usted le tiene miedo a esa oscuridad que posee...-mi padre se echa a reír por unos segundos y luego se detiene para cargar el cañón con el odio pintando todo su cuerpo.
-Miedo mis huevos...-ahora la que ríe es ella.
-Una última pregunta, señor Durrell...-él la mira fijamente a los ojos.-¿está seguro que siempre va a un paso por delante de nosotros?
-Siempre...-ella asiente ligeramente con la cabeza y le sonríe.
-No esta vez, imbécil...-ella se hace a un lado rápidamente y yo tiro el cuchillo hacia mi padre con mucha fuerza.

Este se le clava en el lado izquierdo del abdomen y lo hace retroceder hasta volverse a sentar sobre el banco.

Clavo la mirada en ella pero sus ojos están fijos en él.

Hago el intento de acercarme pero en cuanto doy un paso, ella se coloca frente a mi y el sonido del disparo retumba por todo el apartamento.

"No..."

[Completa]-¿SIGUES SIENDO MI FUCKBOY? 🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora