𝐒𝐃 || Ellie LeBlanc se muda a la ciudad de All Valley en donde conoce a Eli y Demetri, con el tiempo ella se hace mejor amiga de estos dos. Pero ¿qué pasara cuando se entere que ambos sienten algo por ella?.
"Son mis mejores...
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Me dirigí hasta donde estaban mis amigos, quienes me miraban algo preocupados, pero no le di mucha importancia, me hacían algunas preguntas acerca de lo que pasó ya que Demetri les había contado todo pero simplemente las ignoraba o las respondía desinteresadamente, al terminar el almuerzo fuimos a nuestras ultimas dos clases, por suerte en ninguna de ellas estaba Yasmine, no quería verla ni en pintura porque sin duda alguna explotaría, ya al terminar las clases Miguel se ofreció a llevarme hasta el famosísimo dojo del que tanto no paraba de hablar, no estaba muy de acuerdo con la idea del karate porque como le dije a Migue "con las justas y puedo pararme" pero el insistió y no tuve opción más que aceptar.
- Bienvenida a Cobra Kai - exclamó Miguel señalando un local bastante grande con una serpiente como logo
- Cobra kai? - dije sorprendida y el asintió - es un nombre bastante genial
- Lo sé, ahora pasemos - abrió la puerta y ambos entramos
- Bienvenidos a Cobr- ah solo eres tú - dijo un tipo de cabellera rubia, vestido con algo parecido a un enterizo negro, supongo que debe ser el sensei del que tanto me hablaba Miguel
- Sensei Lawrence, traje a - dijo Miguel
- Quien es ella? - interrumpió aquel señor señalándome
- Ella es Ellie y viene a unirse al dojo - habló el trigueño con entusiasmo mientras que el rubio soltó una carcajada en modo de burla
- Es broma no? - se dirigió a Miguel y el negó con la cabeza - te agradezco que vinieras pero no hay chicas en Cobra kai - ahora se dirigía a mi
- Y por qué no? - dije con algo de molestia en mi voz
- Por la misma razón que no las hay en el ejercito, no tiene sentido - dijo y Diaz rodó los ojos al igual que yo
- Sensei, necesito mostrarle algo en la oficina - dijo Miguel y se llevó al tipo hacia el lugar mencionado mientras que yo me quedé en la puerta esperando
Después de unos minutos ambos salieron de la oficina, Miguel salió con una enorme sonrisa victoriosa así que deduje que el sensei había permitido que me una al dojo.
- Bien quítate los zapatos, ven a la colchoneta - dijo e hice lo que pidió emocionada - luego de considerarlo decidí aceptar estudiantes mujeres , pero si quieres estar aquí no puedes actuar como una chica
- Que quiere decir con eso? - pregunté
- Ya sabes como actúan las chicas, chillonas, llorando por todo, interrumpiendo cada frase - dijo sonando obvio
- Que?, nosotras no actua - iba a decir algo pero el sensei me interrumpió
- SILENCIO! - gritó haciéndome callar y sobresaltar un poco - mi estudiante me dice que te molestan en la escuela - al decir esto miré a Miguel y el agachó su cabeza
