Capítulo 55 - Flashback 2

3.1K 251 87
                                    

Amelia POV

La noticia de que Luisita iba a llevar todo el marketing de mi carrera no me podía haber alegrado más. Nadie me conoce como ella, y al haber sido mi fan durante tantos años antes de saber quién era también hace que conozca a mi público desde otro punto de vista, así que como ya ha demostrado en el pasado, estoy convencida de que todas las decisiones que tome serán las correctas. Aunque ya se había reunido con todo el equipo de marketing para dar el visto bueno al calendario que iba a seguir, Luisita no me había dicho absolutamente nada en casa. De hecho, se molestó un poco conmigo por insistirle, y se mantuvo firme en su idea de que no iba a hablar de trabajo conmigo en casa, y mucho menos dándome información sobre cosas que a otras personas que tenían que saber antes, como Lourdes. Decidí dejarlo pasar y no insistir más, pero ahora más que nunca tenía claro que el jueves me plantaría en la reunión que tenía con Lourdes y me enteraría todo de primera mano. Hasta entonces nunca me ha interesado estar en las reuniones de marketing, sino que iba Lourdes y ella luego me hacía un resumen, yo me enfadaba por las decisiones que habían tomado y no me gustaba, e intentaba hacer lo mínimo posible de lo que ellos pedían, lo suficiente para no tener problemas. Ahora esto ha cambiado y digamos que estoy empezando a entender la importancia de involucrarme en quien decide por mi imagen.

El despertador sonó y lo apagué enseguida. Me giré a abrazar a mi novia que dormía plácidamente a mi lado y le di un ligero beso en la mejilla seguido de una caricia. Ella me contestó con una media sonrisa aun con los ojos cerrados y seguí acariciando su mejilla. A lo largo del tiempo había descubierto que Luisita tiene un mejor despertar si la despierto de esta manera a si se despierta escuchando la alarma, así que la despertaba todas las mañanas rodeada de caricias hasta que por fin abría los ojos.

-Buenas días, cariño - le susurré.

-¿Es sábado? - me contestó en el mismo tono, sin abrir todavía los ojos .

-No, es jueves...

-Jo, porque estaba soñando contigo.

-¿Ah sí? ¿Y qué estabas soñando? - se le dibujó una sonrisa en la cara y abrió los ojos para mirarme.

-No te lo puedo contar...

-¿Ah no?¿Y por qué no?

-Porque era un sueño muy gráfico, tendría que mostrártelo - seguía susurrándome pero ahora juguetonamente.

-Me parece estupendo, enséñamelo - le contesté en el mismo tono.

Entonces Luisita me empujó para atrás acostándome completamente en la cama y se subió encima de mí. Puse mis manos sobre sus piernas y ella se acercó a milímetros de mi boca. Estuvo en esta posición unos segundos, mirando mis labios. Pasó sutilmente su lengua por mi labio inferior y lo cogió entre sus dientes mientras me miraba a los ojos. Mis manos subieron a su culo y cuando iba a besarla en condiciones, se alejó de mí y bajó de la cama.

-¿Perdona? - fue lo único que conseguí decir.

-Ya te he mostrado lo que estaba soñando. Ha sido una pena que me hayas despertado justo en ese momento - hablaba sabiendo que tenía todo el poder de este juego. - Además, es jueves y tengo una reunión a la que no puedo llegar tarde, sorry. - Y sin más, se fue a vestir, dejándome en la cama sin compasión alguna e incrédula por lo que acababa de pasar.


Durante el desayuno, Luisita estaba revisando unos emails en el móvil y prácticamente no hablamos, pero en el coche me puso al día de lo que iba a hacer hoy.

-Ahora tengo que ver a Kate en su oficina para que me entregue unos papeles urgentes y después de la reunión con Lourdes, Álex me ha pedido que la ayude a elaborar los ingresos estimados del mes que viene. Ayer en clase dimos un método distinto al que utilizamos en la discográfica. ¿Crees que lo debería de proponer? - hice un ruido de afirmación. - Pues sí, se lo voy a decir, y si no le gusta pues seguimos haciéndolo del mismo modo - continuó. - Después de clase me pasaré por la biblioteca a por un par de libros, pero supongo que estaré libre a partir de las 7. ¿Tú a qué hora terminas?

La cantante y su musa || LUIMELIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora