Capítulo 1. (3)

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 Capitulo 1

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 Capitulo 1.
Temporada 3. 

Habían pasado varios meses desde que Maddox dejó Arkadia, antes conocido como campamento Jaha. Desde ese entonces, la chica había terminado por acostumbrarse a la vida de los terrestres. A sus reglas y tradiciones. Aunque le costaba un poco el idioma, Lexa le tenia demasiada paciencia. Con el único que mantuvo contacto, fue con su padre. El cual las venia a visitar constantemente. Suponía que Bellamy ya sabia donde estaba, pero nunca recibió algún tipo de mensaje de su parte. Esperaba que el chico apareciera y poder reencontrase, pero su esperanza acabó cuando Marcus le dijo que lo vio con otra chica. Una tal Gina.

Cuando Lexa la presentó ante el pueblo y los doce clanes, la apodaron Praimheda. Por la legitima, que cayó del cielo siendo Natblida. Así era ella, convirtiéndose en la segunda de Lexa y en una guerrera, contando su historia. Se arrodillo ante la comandante, jurando lealtad y protección, vivía con tranquilidad y sin que la muerte de todos la persiguiera. Pero algo le faltaba, y eso era Bellamy.

- ¡Muévete, Liz! - Gritaba Leigh, uno de los hermanos mayores de Lexa. - ¡No retrocedas! - Toda la familia real, incluyendo a Maddox, se habían sentado a observar la practica de la menor. - Ha mejorado muchísimo. - Comentó mientras tomaba unas uvas y las comía. Maddox asintió, copiando su acción.

-¿Has pensado en Wanheda? - Le preguntó Dain, otro de los hermanos.

-Lo hice. - Contestó atenta a la niña. - He mandado a Roan, si la trae, volverá a Polis. - Maddox frunció el ceño.

-Sabes que Roan ha causado mucho desastre en la capital. - Le dijo a su hermana.

-Maddox tiene razón, no hay posibilidad que cambie. - La apoyó Dain.

– ¿Están cuestionando mis decisiones? – Habló molesta. Todos se quedaron en silencio, generando una situación incomoda. - Lo que hago es para proteger a mi pueblo, y a Arkadia.

-¡Maddox, Maddox! - La pequeña de la familia vino hacia ella, y la tomó del brazo. - ¿Entrenas conmigo? ¡Porfisss! - La chica rió al igual que los presentes.

-Esta bien, pero solo una ronda. - Liz festejó y volvió al centro del campo. Maddox tomó una espada de madera y se puso frente a la pequeña. Se posicionó y giró la espada acomodándola en su mano. Liz avanzó con ligereza hacia ella, atacándola con todas sus fuerzas. Maddox retrocedía mientras esquivaba con facilidad los golpes. No pudo evitar reír por la cara de la pequeña dándolo todo.

– ¡Es muy básico, muéstranos algo nuevo! - Le gritó Leigh. Liz gruñó concentrándose, lanzó espadillazos a los pies de la contraria. Maddox con intención cayó al suelo y la niña aprovechó para lanzar su espada lejos, colocando la suya en el cuello de la mayor. Luego la apartó y comenzó a festejar, corriendo hacia los brazos de Leigh. - ¡Bien hecho! - Todos rieron mientras Maddox se levantaba del suelo y se sacudía la ropa. Debía de admitir que seguir optando por vestirse como una gente del cielo, le gustaba bastante. Era cómoda y le ayudaba a recordar de donde venia. Lexa se levantó de su asiento y le hizo una señal. Esta dejó un beso en la cabeza de Liz y la siguió, llevándose consigo su espada. Detrás de ambas, la seguía Titus, el guardallamas de Lexa.

𝐿𝐼𝐹𝐸 𝐺𝑂𝐸𝑆 𝑂𝑁 - 𝘉𝘌𝘓𝘓𝘈𝘔𝘠 𝘉𝘓𝘈𝘒𝘌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora