↓cuatro↓

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Corrió hacia el castaño y hagachandose lo abraza, Jisung se asustó al sentir el calor del mayor, hace mucho tiempo que no recibía muestras de cariño, subió la mirada fijándose en los ojos preocupados que lo miraban en busca de respuestas, para luego cubrirse el rostro vergonzosamente nuevamente con sus manitos, en cierto modo un poco aliviado de que fuera él, aunque seguía siendo un completo extraño sentia que podía confiar en él en ese momento. Simplemente se permitió estar entre los brazos del mayor aunque sea por un momento.

— Tranquilo, yo estoy contigo— Dijo Minho acariciando su cabello esponjoso intentando calmar los sollozos del chico entre sus brazos como si fueran completamente cercanos.

Jisung comenzó a tranquilizarse poco a poco al sentir el calor de su pecho y secando sus lágrimas avergonzado le dice con las pocas fuerzas que le quedan que él está bien y que no se preocupe. ¿Cómo podía mentirle así? Minho frunció su ceño frente a su respuesta haciendo que el menor se asustara y retrocediera un poco.

— Disculpame, no soy bueno en esto.. yo solo queria ayudarte pero no sé cómo hacerlo, yo.. ya lo sé todo— Jisung lo miró confundido aún con lagrimas en sus ojos las cuales Minho intentaba limpiar.

— Tu amigo Felix me contó lo que pasó— Dijo el mayor tratando de explicarle viendo como el rostro del castaño comenzaba a ponerse pálido y unos segundos más tarde se encontraba sosteniendo el cuerpo del menor que había caído inconsciente en sus brazos.

— Jisung! Jisung! Despierta!— Minho no sabia qué hacer, el chico acababa de desmayarse frente a él y debía hacer algo pronto.

Lo primero que pasó por su mente fue llevarlo al hospital, debía cerrar el local para llevárselo. Buscó en los bolsillos del menor las llaves y tomándolo en sus brazos salió del lugar cerrandolo, notó que el chico era muy ligero, pesaba muy poco, eso estaba realmente mal.

Al salir hacia mucho frío y no logródarse cuenta en qué momento se había puesto a llover, el castaño solo vestía su uniforme y debía protegerlo de la lluvia de alguna forma. No podía sacarse su chaqueta al tenerlo en sus brazos y lo único que pudo hacer fue acercarse a su cuerpo para cubrirlo de la lluvia con su pecho, mientras le hacia señas a los taxis para que alguno le parara y los llevara.

Cuando logró subirlo al auto se sacó su chaqueta y lo abrigó para luego intentar despertarlo pero el chico no reaccionaba, el chófer comenzaba a sentir la misma angustia que estaba sintiendo Minho en esos momentos, acelerando para llegar lo antes posible al hospital, con miedo de que las ruedas resbalaran con la lluvia.

Cuando llegaron el chófer ayudó a Minho a bajar del auto, el chico corrió con Jisung en brazos pidiendo ayuda, a los pocos segundos después había dejado el cuerpo del castaño en una camilla para luego ver cómo se lo llevaban sin dejar acompañarlo.

El pelinegro se quedó impaciente esperando noticias, sintiendo miedo y un vacío ¿Cómo pueden tardar tanto? Minho caminaba de un lado a otro con el corazón en la mano queriendo respuestas, de pronto una enfermera se le acerca para darle las noticias.

— Disculpe, ¿Usted fue el que trabajo a Han Jisung verdad?— A lo que Minho asintió rápidamente teniendo toda su atención.

— El chico está en proceso de un lavado gástrico por intoxicación, esto suele durar unas horas. ¿Usted cuando lo encontró, vió algún paquete de pastillas vacío o algo sospechoso cerca del chico?— Dijo la chica mientras Minho solo negaba con la cabeza sin lograr procesar toda la información que ella le estaba dando en ese momento.

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