HELP | minsung

↓seis↓

El mayor se rió con maldad mientras Jisung casi sufría de un paro cardíaco del susto, pero luego de unos segundos comenzó a reírse con él. El castaño siguió sus pasos viendo a Minho adueñarse de su cocina y comenzando a cocinar por él.

Al sentir su garganta un poco mejor, no paraba de hablar y aunque las cosas que dijera no tuvieran ningún sentido, Minho le respondía feliz al ver que el rostro del menor ya no se veía tan triste como antes, quizá sólo necesitaba que alguien lo cuidara y se preocupara un poco de él o quizá sólo necesitaba a alguien para conversar.

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El almuerzo ya estaba listo y habían dos platos completamente distintos sobre el mesón, Jisung lo miró con un puchero sabiendo que no podía quejarse mientras Minho moría de risa pero intentaba contenerse para no hacerlo sentir mal. Mientras el mayor comía de un contundente ramen que lucía muy bien, a Jisung le tocaba una sopa de pollo con fideos finos que se veía muy simple.

— Mmmh— Musitó el menor abriendo sus ojitos— Sabe muy bien!~~— Dijo el volviendo a verse animado.

Minho sólo sonreía y seguía comiendo procurando estar listo si Jisung se llegaba a ahogar con la comida.

— Hey! come más lento, recuerda que tu garganta aún no está bien..— Le dijo a un Jisung que lo miraba con las mejillas llenas de sopa de tanta hambre.

Minho rodó los ojos y siguió comiendo, más tarde cuando ambos terminaron, el mayor retiró los platos y los lavó. Ya habían dejado todo limpio y no tenían nada más que hacer, Jisung lo miró ante el ambiente incómodo que se había creado en unos segundos.

— ¿Quieres que me vaya?— La voz del mayor se escuchó fuerte y claro, a lo que Jisung sólo se le quedó mirando.

Al recibir esa respuesta Minho entró en pánico ¿Eso era un si? tomó su chaqueta y se despidió del chico que aún estaba en silencio mirándolo y salió del apartamento rápidamente, de igual manera como lo hacía cuando iba a comprar al local. Jisung quedó completamente mudo y solo, otra vez.

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Estando ya fuera, Minho quedó estático pensando qué haría el resto del día, ¿Donde iría? Podría ir a la facultad a tomar la última clase y luego ir a entrenar. Decidido fue a la facultad, sus compañeros de salón sólo lo miraron extrañados ya que entraba a la clase sin ningun papel o lapiz para escribir los apuntes, Minho sólo tomó atención mientras sentía la mirada de los demás.

*¿Tanto les asombra?* Pensaba Minho queriendo que la clase transcurriera más rápido y cuando porfin concluyó se juntó con el equipo de básquetbol, el capitán del equipo lo llamó apenas lo vió entrar al gimnasio.

— Hey!

— Hola Chris— Minho saludó a su compañero, él era la persona más cercana a la que podía llamar un amigo, Chris siempre se preocupaba por él y de vez en cuando lo invitaba a comer. Su familia también lo querían mucho y se alegraban cuando iba a casa

— ¿Estas bien? Te ves mejor que ayer— Dijo Chris sonriendole.

— ¿Mi mamá no te ha llamado?

— No, ¿Por qué?

— Ayer le dije que pasaría la noche en tu casa, lo siento..

— Está bien.. tienes suerte de que no me haya llamado.. espera un momento..¿Que significa eso? ¿Dónde pasaste la noche Minhonnie? ¿Tienes novia?— Dijo Chris con mirada coqueta empujándolo suavemente hacia atrás.