❣ Capítulo 16 ❣

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Capítulo 16

La GHB, es una droga que se fábrica de forma ilegal en "laboratorios" domésticos clandestinos. Por lo general se encuentra en forma líquida y es incolora e inodoro. Su uso es muy extendido por clubes nocturnos, además dicho estupefaciente es usado comúnmente por la comunidad homosexual para facilitar la actividad sexual entre dos o más compañeros.

Pero sus efectos secundarios son muy peligrosos e incluso mortales, sobre todo si la droga se mezcla con alcohol. 

Lo que la GHB provoca en el cuerpo es un "subidón" de euforia. Un aparente incremento de la sensación de felicidad e incluso alucinaciones. Pero dicha sensación depende de cada organismo, pues las personas pueden llegar a experimentar además somnolencia, mareos, náuseas, vómitos y problemas de visión. Las personas que toman GHB pueden incluso perder la consciencia, dejar de respirar y entrar en estado de coma. Y en el peor de los casos, una muerte segura.

A Mew lo habían drogado con ese estupefaciente, sin embargo, él solo experimentó la somnolencia y la pérdida de la consciencia pues la dosis había sido muy poca y en forma de pastilla lo que disminuye los efectos negativos sobre el cuerpo del consumidor. 

No obstante, el consumo y el tráfico de drogas en Tailandia es un delito bastante delicado que se trata con mucha seriedad y severidad. Las leyes tailandesas contemplan como condena a estos delitos, cadena perpetua y la pena de muerte en los casos más graves.

Lo que Nice y Art habían cometido en contra de Mew era un serio delito que debía ser penado, y para fortuna del señor Jongcheveevat tenía la prueba que inculpaba a Art Pakpoom como el traficante del narcótico y además del consumo del mismo durante prácticas sexuales en un establecimiento de entretenimiento para adultos que Art solía visitar. 

Nice como su cómplice, también tendría problemas legales, y bastante serios, pues él había sido la persona que había suministrado la droga a su hijo poniendo en grave peligro su vida, ese hombre era el autor intelectual al final de cuentas; quizás lo único bueno que había hecho aquel muchacho idiota había sido darle dicha pastilla con jugo, pues de haber sido con alcohol probablemente Mew no seguiría con vida.

- Con toda la evidencia obtenida, podemos poner una demanda y seguramente el juez condenará de inmediato a los implicados sin necesidad de ir a juicio – le mencionó Khan al señor Jongcheveevat.

- ¿Qué condena alcanzarán esos dos? –

- El tráfico y el consumo es mucho más grave, además con la tentativa de homicidio en contra del joven Mew agrava la situación – respondió el hombre.

- ¿Cadena perpetua? – preguntó el padre de Mew a lo que su interlocutor negó con la cabeza.

- Pena de muerte – 

Art Pakpoom podía recibir la pena capital por los delitos cometidos. Aunque su ejecución podría tardar años debido a las organizaciones civiles que velaban por los derechos humanos de los delincuentes condenados a muerte. 

- ¿Cuál sería la condena del otro sujeto? –

- Varia señor Jongcheveevat – respondió Khan – si el joven Nice coopera con las autoridades le pueden consignar de treinta a cuarenta años de prisión –

- ¿Y si no lo hace? –

- Cadena perpetua –

- Entonces proceda con la demanda, quiero acabar con todo esto de una vez por todas –

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