CAPÍTULO 29

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"¡Que maduros!"

Luego de empezar a caminar Aidan fue tras de mí.
–¡T/N, espera! -dijo mientras me tomaba de la mano y me giraba hacia él-
Como ya era costumbre cada que Aidan me giraba hacia él, nuestros cuerpos quedaron muy juntos, casi rosándose.
–¡Ahhh! -le grité en la cara- ¡Ya! Ya no quiero más drama en mi vida, no quiero más discusiones, ni peleas, no quiero celos, no quiero problemas amorosos y no quiero rencores. Aidan, ya yo te había perdonado antes de que te disculparas. Supongo que tú ya me perdonaste también
–Yo no tengo nada que perdonarte, pero si te hace sentir mejor, claro que ay te perdoné -me sonrió y luego me tomó suavemente la cara y me besó-
–Aidan, no, esto no puede ser, tú estás con... ¡Ahh! Como sea. El punto es que ya nos perdonamos mutuamente, así que sólo olvidemos esto y sigamos cada uno con nuestras vidas. Si me disculpas, tengo que ir a casa
–Déjame acompañarte
–No, tú tienes que regresar a la fiesta
–Entonces, ¿amigos?
–¿Qué? -dije con sorpresa- No cabe duda que estás ebrio. Oye, yo dije sin rencores, pero, ¿amigos? ¿Hablas en serio? ¿Cómo se te ocurre preguntar eso después de todo lo que ha pasado?
–No, es que no estoy ebrio, bueno sí, un poco. Pero estoy consciente de lo que digo, tal vez no lo pienso antes, pero lo digo en serio, quiero decir... Yo sólo quiero que olvidemos todo y empecemos de nuevo -dijo  un poco incómodo-
–Supongo que eso suena mejor -dije sonriendo ligeramente- Ok, olvidemos todo esto y...
–Soy Aidan -dijo interrumpiéndome mientras sonreía-
–Y yo T/N -le sonreí-
Sólo espero que por tu estado, mañana no recuerdes nada de esto, porque yo no quiero ser tu amiga, yo quiero ser tu novia -dije con desánimo en mi mente-
Aquella noche Aidan insistió en acompañarme a casa, pero yo me negué. Al día siguiente por la tarde Mau me envió un mensaje diciendo que quería verme en un Skate Park, así que me dirigí hasta ahí y vi a Mau esperando con una patineta en las manos.
–¿Para qué querías verme aquí? -dije mientras me acercaba a él-
–¿No es obvio? ¡Para esto! -dijo mostrándome la patineta-
–¿Qué es eso?
–¡Una patineta!
–Sé que es una patineta, quiero decir, ¿para qué una patineta?
–Para comerla, las patinetas son deliciosas, ¿las has probado? -dijo sarcástico-
–¡Ay! -rodé los ojos-
–¿Recuerdas que alguna vez me contaste que te gustaría aprender a andar en patineta?
–Sí, lo recuerdo
–Pues te presento a Mau el skater, con mi ayuda y tu disposición lograrás ser una gran skater -dijo sonriendo-
–¿Tú sabes andar en patineta?
–En teoría -dijo Mau rascándose el cuello-
–No entiendo
–Verás, de pequeño solía practicar Skate
–Espera, ¿de pequeño? ¿Hace cuántos años?
–Hace como 8 años, más o menos
–O sea, no sabes andar en patineta -dije y reí-
Mau ignoró mi comentario y siguió hablando.
–Te decía, yo solía practicar Skate junto con Aidan y unos cuantos amigos más
–Aidan, claro
–Sí. Por cierto, ¿él y tú estuvieron juntos anoche?
–Define "juntos"
–Juntos; dícese de no creo que sea casualidad que ayer ambos hayan desaparecido de la fiesta al mismo tiempo. ¿Dónde estaban?
–En el parque que está cerca de la casa de Roby -confesé-
–¿Cómo por?
–Aidan dijo "necesito hablar contigo pero aquí no", me llevó hasta ese parque y luego empezó a disculparse. Aidan me pidió perdón
–¡Vaya! Ya era hora. ¿Y qué más?
–Resumiendote; Aidan me pidió perdón por todo lo que ha pasado entre nosotros, yo le dije que lo perdonaba, después él preguntó si seremos amigos y yo le dije que cómo se le ocurría pedirme que fuéramos amigos después de todo lo que ha pasado y él dijo "yo sólo quiero que olvidemos todo y empecemos de nuevo" -dije tratando de imitar la voz de Aidan-
–¿Qué fue eso? -preguntó Mau riendo-
–Oh, creo que sólo es mi voz genérica de hombre
–Hazlo otra vez
–¡No! -dije riendo- Al final decidimos que olvidaremos todo lo desagradable que sucedió entre nosotros y decidimos empezar de nuevo. Así que ahora dejaremos que todo fluya sin ponerle una etiqueta de "amistad" o algo así a nuestra relación
–No pues, ¡que maduros! -dijo Mau mientras reía-
–¡Oye! Claro que lo somos. Decidimos volver a empezar y así nos evitamos más problemas y dolor y así todos somos felices
–No, no lo son. Una persona madura no evade sus sentimientos diciendo "volvamos a empezar". Una persona madura dice, "¿sabes qué wey?, me sigues gustando, te amo, seamos pareja", luego se besan y así todos somos felices
–¿Y eso sí es maduro? -pregunté riendo-
–Sí, sólo quítale el "wey" -dijo y ambos reímos- Lo que trato de decir es que olviden el drama, se dejen de estupideces y sólo sean novios. ¿O ahora vas a negarme que Aidan te sigue gustando?
–Pues...
–¡Exacto! A ti te sigue gustando Aidan y tú le sigues gustando a él, ¡sean pareja y listo!
–Mau, no es así de fácil, Aidan está con Roberta
–Pfff, ¡ay, por favor! Aidan y Roberta sólo estuvieron juntos un ridículo mes
–¿Qué? -pregunté con sorpresa- ¿Y por qué no me lo habías dicho?
–Oh, pequeño detalle que se me pasó contarte, pero te lo diré ahora...

Aidan Gallagher, el primer chico del que me enamoré (Aidan y tú) [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora