Aidan Gallagher, el primer chico del que me enamoré (Aidan y tú) [1]

CAPÍTULO 8

"Para sentirte cerca"

–Ya llegué -grité al entrar a casa-
–¡Que bien! Ya vamos a comer, ayúdame a poner la mesa, por favor -dijo mi madre desde la cocina-
–Sí, sólo déjame subir mis cosas a mi habitación. 
Dejé mi mochila y mis cosas en mi habitación, saludé y acaricié a Alvin, que como siempre, estaba echado sobre mi cama. Después bajé a la cocina y ayudé a mi mamá a poner la mesa.
–¿Y esa sonrisa?
–¿Cuál sonrisa? -dije y automáticamente pensé en Nadia-
–La que tienes desde hace unos días y nada ni nadie te la quita. Ok, yo ya había dicho que mis padres no son de cuestionarme prácticamente nada, y para que mi madre preguntara eso, es porque seguro estoy entrando a la etapa de sonreír como idiota y sentir "mariposas en el estómago" cuando piensas en la persona que te gusta.
–¿Ah, sí? No es nada, tú sabes, sólo recuerdo las tonterías y locuras de Daniela y automáticamente aparece una sonrisa en mi rostro -dije esperando a que mi madre ya no insistiera-
–Y, ¿además de "las tonterías y locuras de Daniela", existe otro motivo?
–No, ningún otro motivo. ¿Y papá? -traté de cambiar la conversación-
–Oh, yo creo que ya no tarda
–¡Ya llegué familia! -dijo entrando a casa mi padre-
–Te dije que no tardaba -dijo sonriendo-
–Hola T/N, ¿cómo te fue en la escuela?
–Hola pá, -lo saludé- pues bien, tú sabes, como siempre
–Pues "como siempre" es excelente, entonces yo espero que así sea
–Sí, claro, así es.  -sonreí-
Excepto en álgebra -dije en mi mente-
Terminando de comer subí a mi habitación, jugué un rato con Alvin y luego hice cualquier cosa, excepto la tarea. Vi el reloj y ¡Dios! Ya eran las 5:00pm. Tengo que hacer tarea y luego ver a Nadia, digo, después ir al Starbucks. Vamos T/N, tú puedes terminar la tarea en una hora, ¡vamos! Me apresuré a terminar la tarea lo mas rápido posible. Volví a ver el reloj, 6:08pm. 8 minutos después pero por fin terminé. Ahora sí, vamos a Starbucks. Tomé uno de mis buzos, un poco de dinero y salí de mi casa.
Cuando llegué al Starbucks vi a Aidan atendiendo a unas personas, así que sólo decidí sentarme donde siempre lo hacía. Saqué mi celular del bolsillo de buzo para comenzar a leer mientras ordenaba mi frappé, esta vez no me coloqué audífonos.
–Hola -saludó sonriendo- un vainilla cream frapuccino y galletas doble chocolate, ¿cierto? -Por fin Aidan había ido hacia mi mesa-
–Sí y también un Aidan Gallagher, por favor -dije sonriendo-
–¡Claro, enseguida!
Después de unos minutos, Aidan regresó con el frappé y las galletas.
–Aquí tienes, un vainilla cream frapuccino y galletas doble chocolate más un Aidan Gallagher, el último es el mejor -sonrió y se sentó frente a mí-
–Oh, ¡excelente servicio, gracias!
–¿Y tus audífonos?
–Oh, decidí no usarlos hasta que trajeras mi orden, así que con permiso, procederé a escuchar música
–¡Espera!
–¿Qué? -grité-
–¿Qué playlist reproducirás?
–¿Ah?
–Sí, ¿cuál es tu playlist de hoy?
–Uh, pues mi música siempre está en aleatorio
–Oh, entiendo, entonces, ¿cuál es la primer canción que reproducirás?
–Don't Stop Me Now de Queen -dije confundida-
–¡Perfecto! Entonces yo me colocaré sólo un audífono, porque si no, no escucho a los clientes -rio ligeramente- Pondré mi música en aleatorio y empezaré a reproducir Don't Stop Me Now
–¿Para qué?
–Para sentirte cerca -me sonrió-
–No entiendo. Estamos cerca, digo, yo estaré aquí y tú allá -dije señalando a la barra-, estamos cerca -le sonreí-
–Sí, pero no lo suficiente. Un cliente, iré a atenderlo. -Dijo mientras reproducía la canción en su celular- Yo ya estoy reproduciendo Don't Stop Me Now, ¿tú? -sonrió-
Le dí "play" a la canción en mi celular
–Sí, ya -sonreí-
Aidan se levantó de la mesa y se fue a atender a los clientes.