Siempre estaré para ti pequeño

1. 1, 2, 3, 4, 5

Tn

1,2,3,4,5  contaba los segundos para poder salir de mi oficina y poder ir a casa.

Desde que soy una niña nunca me llamó la atención  salir de casa o tener muchos amigos, siempre preferí estar sola en casa lejos del mundo y de la sociedad.

Tú: Estoy cansada, al menos ya terminé este trabajo- Dije mientras guardaba mis cosas.

Salí de mi oficina y empecé a caminar hacía la salida para buscar mi auto, bajé y caminé por el estacionamiento, me detuve al escuchar una voz.

Tae: H-hola noona- Dijo con una bebé entre brazos- me recuerda?

Lo recuerdo muy bien, tuvimos un polvo hace poco más de un años, pero hay algo extraño luce diferente, él me había dicho que era beta pero si olor de ahora me dice otra cosa totalmente diferente.

Tú: Sí.

Tae: Lo que pasó hace más de un año....algo salió mal, usted me embarazó.

Me sorprendí al escucharlo ¿Cómo era posible? Él me había dicho que era un beta.

Tú: ¿Eras omega?.-Aquí estaba mi respuesta.

Tae: Sí...perdón por mentirle noona, esta bebé es nuestra hija.

Tú: Pero ¿cómo lo hiciste? no olías a omega-Deje de hablar cuando bajó su cabeza y sentí su olor, olía a un omega asustado.-Vamos a casa para hablar mas tranquilamente, ven- le abrí la puerta del auto para que subiera.

Soy CEO de mi propia empresa, soy una alfa muy conocida y respetada al igual que como mi padre lo fue un día.

Después de un viaje hasta mi casa en el cual me hice muchas preguntas llegamos y todas mis preguntas fueron respondidas.

Tú: ahora entiendo mejor, ¿Cuánto tiene?

Tae: 5 meses.

Tú: No preguntaré porque me lo dices hasta ahora, seguramente tuviste tus motivos.

Tae: E-enserio me cree?.-Dijo mirándome a los ojos con una mirada cansada pero al mismo tiempo con un poco de luz.

Tú: -suspiré- ¿Tengo que tener motivos para desconfiar?

Tae: -sonrojado- N-no, no yo...

Tú: Tranquilo Tae.- vi a la bebé que dormía plácidamente en mi cama.- Ven siéntate.

Tae: Gracias noona.

Tú: ¿Qué edad tienes?

Tae: 25 años.

Tú: Eres menor que yo.

Tae: Usted tiene 26 años.

Los omegas no me agradan mucho y el simple olor de este chico me hace sentir extraña, siempre preferí a los betas, sin olor, sin celos, sin un lobo interior simplemente personas normales.

Pero ahora era diferente embaracé a un omega y aunque en parte los omegas me desagradan nunca les haría daño.

Tú: Imagino lo difícil que ha deber sido para ti todo esto.

Tae: No se imagina cuanto miedo sentí.- sus ojos se pusieron vidriosos

Tú: Eres fuerte pequeño, gracias por cuidar de mi hija, luces cansado, ven te daré una habitación para que descanses yo me haré cargo de la bebé.

Me sentí peor que una mierda, él pasó el miedo del parto solo, se sintió abandonado seguramente ¿Qué pensaría mi padre de mí si estuviera vivo aún?, seguramente me habría golpeado hasta dejarme inconsciente.