Siempre estaré para ti pequeño

13 (Especial lobo de TN y Tae)

Lobo de TN

Me desperté en un lugar diferente al que siempre estoy, estaba confundida, me levanté y vi por la ventana y esta daba a un hermoso jardín de rosas y pude divisar a alguien en medio de esas rosas, era un ser completamente hermoso, vestía de blanco al verme me sonrió.

Bajé las gradas de esa cabaña y me dirigí hacía ese ser hermoso, a medida caminaba en ese jardín de rosas me sentía muy feliz, llegué hasta ese hermoso ser y me detuve enfrente de él.

-Bienvenida a casa TN.-Exclamó con una bella sonrisa.

-Eres el lobo de Tae.

-Y no sabes cuanto te he esperado.-Dijo acercándose a mí poniendo sus brazos en mi cuello.

-Estoy en casa...

-Así es, ya no te preocupes, no estas sola.

Puse cuidadosamente mis manos en su cintura acercándolo lentamente a mí, en realidad olía muy bien y era muy hermoso, tanto que quería hacerlo mío de una vez por todas.

-Mi hermoso omega.

-Mi fuerte alfa.

Lo acerqué aún más a mí y nos unimos en un beso las manos del lobo de Tae se posaron en mi cabeza acariciando mi pelo mientras mis manos subían y bajaban por su cintura, el beso era cálido y lleno de algo más que solo deseo físico.

Mi anhelo era cuidar de este hermoso omega, quería hacerlo mío para que todos sepan que este hermoso ser ya tiene dueña.

Lo apreté aún más contra mí y seguí disfrutando de ese hermoso beso, pronto un olor a rosas se fue intensificando, eran las feromonas de felicidad de mi bello omega.

Deseo ser su esposa, marcarlo, hacerlo mío de todas las formas posibles, quiero que lleve mas de mis cachorros en su vientre, joder me estoy emocionando mucho.

Nos separamos del beso y unimos nuestras frentes nos tomamos de las manos y simplemente empezamos a sonreír nos separamos un poco y volvimos a besarnos.

Solo somos él y yo nada más existía para mí, ese momento en el que sabes que no es tu corazón el que te mantiene con vida si no tu omega, ya no vives para ti si no para él, ya no eres solo tú ahora también es él, esos días en los que TN y yo despertábamos solas en la cama ya nunca más volverán, ahora él estará allí cuando despertemos.

Ya no más soledad, tendré la mejor compañía.

-Completamente mío.

-Completamente suya.