Encuarentena2 (DabiHawks) -Omegaverse-

38- Día complicado

Ya habían pasado varios meses desde el viaje del aniversario, todo estaba normalizándose como lo era en un principio. Enji Todoroki volvió a dirigir su empresa, Touya decidió contarle la verdad sobre su verdadero trabajo a su familia, Keigo retomó la universidad, Johana y Toga se mudaron a otro departamento, y nuestra pareja se mudó a otro edificio en donde todo era más seguro y estaban más cómodos.

-Me voy cariño- se despidió Touya yéndose a trabajar.

-Te olvidas tu celular- habló Keigo sentado en el desayunador de la cocina con su mano extendida sosteniendo el celular de su novio.

-Gracias, sin ti perdería la cabeza- Touya le dio un pequeño beso en los labios.

-Suerte- deseó el rubio- Ah y arréglate la corbata- Al ver que el pelirrojo tenía problemas para hacerlo decidió hacerlo con sus propias manos- Ahí está.

-Eres un ángel caído del cielo- volvió a halagar Touya y le dio otro corto beso para luego irse hacia la puerta.

-Sería un demonio entonces- contestó el rubio.

-No lo arruines- soltó el pelirrojo antes de salir por completo del departamento.

-Lo siento- soltó una risa el rubio- ¿Qué hora es?- se preguntó para luego mirar su celular- ¡Mierda!- insultó- Me olvidé de Física- haciendo referencia a la clase de física en la universidad a la que estaba llegando 5 minutos tarde para conectarse.

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Siendo sinceros, Touya es muy poco olvidadizo, pero es inteligente y estratega, con esto me refiero a que él "se le olvida su celular" o "se le desacomoda su corbata" a propósito, pero le gusta que a Keigo se preocupe por él, lo hace sentir mas amado de lo que ya es. Los últimos meses en los que se han mudado de edificio y en los que su vida se tornó más tranquila fueron los mejores de su vida, nunca pensó amar una persona de la manera que lo hace con Keigo y mucho menos que una persona lo ame como lo hace, pero no todo es color de rosas... Su padre no se ha tomado muy bien el hecho de que lo engañó sobre su trabajo "Me traicionaste y estoy decepcionado" fueron sus palabras, en su verdadero trabajo le sacaron su puesto de jefe por todos los líos que ocasionó en el rescate de Keigo y su padre, la pérdida de su no nacido también es algo que lo devastó por completo, pero nunca se mostró débil ante nadie ni siquiera Keigo, porque su pareja necesitaba un soporte y él logró hacer todo lo posible por mantenerlo en pie, pero todo tiene sus consecuencias, reprimir sentimientos como lo es el duelo, la tristeza, el enojo y la desesperación tarde o temprano volverán el doble de fuerte y eso es justamente lo que le estuvo pasando a Touya.

En las madrugadas se despierta y se levanta de la cama sigilosamente para no despertar a Keigo solo para llorar en el balcón, cuando Keigo se va a realizar algunas compras, él aprovecha en llorar en la cama, evita que su novio se entere de esto porque últimamente Keigo lo está llevando todo bien y no quiere quitarle esa felicidad.

Se siente totalmente roto, pero no puede dejar que nadie lo vea porque se van a preocupar y él odia que se preocupen por él.

-¿Tienes el dinero?- habló un hombre totalmente encapuchado en la oscuridad de un callejón.

-Si, ¿tienes lo que te pedí?- preguntó Touya.

-Tomate una y dejaras de sentir tus problemas- dijo el hombre y le extendió una bolsita con unas pastillas al mismo tiempo que Touya le extendió un par de billetes- Hasta luego- dijo el hombre y desapareció en el callejón.

Touya miró lo que acaba de adquirir- Para mantener su sonrisa- Una pequeña lágrima se deslizó por la mejilla del pelirrojo y luego tomó una pastilla y la tragó.

Luego de unos minutos comenzó a hacer efecto, Touya sentía capaz de subir y bajar de una montaña 5 veces, no pensaba claramente, pero subió a su departamento donde su novio lo esperaba.

-¿A dónde está mi halcón favorito?- preguntó entusiasmado Touya al entrar al departamento.

-¿Ahora soy tu halcón? Pensaba que era tu polli...- El pelirrojo lo calló de un beso- ¡Wow! ¿Buen día en el trabajo?- preguntó el rubio sonriente.

-El mejor de todos- contestó Touya sonriendo exageradamente.

-¿Estás bien?- preguntó el bajo.

-Excelente- contestó el alto y lo volvió a besar, pero esta vez agarró el trasero del omega y lo levantó.

-Touya créeme que quisiera hacerlo tanto como tú, pero no puedo- Al alfa no le importó mucho lo que decía su pareja solo continuó besándolo, mordisqueándolo y lamiéndolo- Touya dije que no quiero- Keigo trataba de empujarlo, pero el alfa no cedía, en cambio presionaba con fuerza las nalgas del omega hasta el punto de lastimarlo- ¡Dije que no!- Keigo sin pensarlo dos veces lo abofeteó y al momento de hacerlo se arrepintió- ¡Oh dios! Perdóname, no fue mi intención, pero no me soltabas y...-

-No importa- Touya se fue enojado a la habitación y cerró la puerta de un golpe.

La respiración de Keigo estaba acelerada, no entendía que acababa de pasar, nunca había visto esa parte de Touya y de verdad lo asustó, le recordó a Kuroguiri...
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Dos capítulos en un día, hoy estoy on fire 😎