1. una amistad peculiar

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Le conté todo lo que me afligía, es bueno escuchando en ninguna ocasión interrumpió mi relato, era agradable encontrar a un alfa, se notaba que era alfa por su compostura, tamaño y aroma, que me escuchara y no solo me dijera que siendo yo el Omega debería mantener la boca cerrada y consentir al alfa que me ha Sido asignado, no me gusta que me digan cómo hacer las cosas el es muy callado y por alguna razón eso me gusta.

Y me tengo que casar con ese cochino alfa - terminé mi relato con un suspiro, nunca había tenido la compañía de un alfa que quiera oír lo que tenía que decir, es más, siempre creí que solo aspiraría al alfa estirado que me tocó por prometido, solté algunas lágrimas - nunca me escucha, no sabe lo que me gusta y ni siquiera le importa conocerme solo quiere que le dé cachorros y que sea su Omega sumiso de por vida.

Pero no tienes que llorar por el - acarició mi rostro, mi corazón  comenzó a latir llevo conociendolo tan poco tiempo y aún así me hace sentir mas y mejores sensaciones que mi alfa asignado, una parte de mi quiere resistirse porque no es correcto pero otra desea que los labios que se esconden debajo de esa bufanda se junten con los míos - mi abuela dice "Если он не обращается с вами так, как вы того заслуживаете, он придурок" vendría siendo algo como si no te trata como te mereces es un imbécil.

Tu abuela es muy sabia - yo igualmente pensaba eso, supongo que su familia es más liberal en ese aspecto, mi madre siempre fue de la vieja escuela siempre tratando de satisfacer a su alfa aunque este fuera una mierda lamentablemente nuestro padre, o mejor dicho padrastro es un asqueroso - oye gracias me siento mejor después de contarlo.

No hay de que, tampoco podía dormir - suspiró con cansancio, me ensimisme en mi propio dolor que no ví que el también tenía sus problemas, me acerqué un poco a el tratando de aplicar lo que mi madre me enseñó para calmar a un alfa frustrado, liberar un poco de feromonas y esperar tranquilo a que el se calme - hueles bien - murmuró haciéndome sonrojar levemente pero por lo menos había funcionado su semblante era de calma, justo lo que quería lograr.

¿Que te pasó  a ti? Si es que puedo saber - me junté un poco más con el, ambos liberabamos pequeñas cantidades de feromonas al sentirnos cómodos el uno con el otro, se combinaban extrañamente era cómo chocolate caliente  en un día nevado cerca de un bosque de pinos, muy extraño pero sencillamente reconfortante.

Discusión con mi hermana mayor - se le notaba un poquito frustrado pero el ambiente ayudaba por lo que se estaba relajando - son cosas de alfas estúpidos - se notaba que estaba frustrado por el tema de los alfas, no lo entiendo realmente creí que ellos lo tenían todo - perdón por eso, es que me frustra tener que encontrar pareja siendo tan joven, aún quiero explorar.

Igual yo - me recosté un poco en su hombro cerrando los ojos y disfrutando de la combinación de aromas, me agrada haber venido aquí de no ser así no lo hubiera conocido.

Creo que creamos un ambiente silencioso pero estaba bien el silencio no era incómodo era más bien un silencio armonioso ya habíamos dicho lo que queríamos decir y estábamos a gusto el uno con el otro, mi Omega estaba como loco queriendo acurrucarse aún más en el tranquilizante aroma del alfa a mi lado pero con mi fuerza de voluntad me le resistí a los instintos banales limitandome a apoyar ligeramente mi cabeza en su hombro, cualquier Omega se volvería loco con tremendo alfa de aroma tan agradable y hermoso a la vista pero a mí me agradaba por demás su personalidad no habíamos hablado lo suficiente como para conocernos a fondo pero ya sabemos cómo somos sin siquiera tener que hablar, en fin, la alegría me duró poco.

México - oía los gritos llamándome, el también se percató de eso pero no lucía para nada alarmado supongo que desde el principio notó que aquel chico que me llamaba era un Omega y yo tenía por seguro quien era - México.

Te están buscando deberías ir con el - murmuró me daba pena tener que despedirme no quería dejar de verlo por siempre quería seguir hablando con el y aspirando su aroma.

Y-yo - a pesar de poder resistirme a los instintos más bajos de ser un Omega no podía evitar sentirme sensible ante esto, no quería perder para siempre su amistad el para mí ahora era un buen amigo alguien a quien no quisiera dejar de ver u oler.

Nos veremos mañana en la noche aquí mismo ¿Está bien? - se dió cuenta de mi sentir tomando entre sus manos mi rostro, habría jurado que se quitó los guantes solo para acariciar con delicadeza mi rostro cerré un momento los ojos y asentí ante sus palabras prometiendole volver mañana por la noche al mismo lugar - me iré por ahora - bajó la bufanda que tenía, podía admirar un poco más su rostro de esta manera pero antes de poder fantasear con ese rostro tallado por los mismísimos angeles el me besó la frente alejándose así y dejándome atónito y también ligeramente sonrojado.

México aquí estás - miré hacia arriba encontrandome con el rostro de mi hermano preocupado pero a la vez enojado - me tenías preocupado.

Lo siento - me levanté del lugar solo pudiendo mirar en dirección de mi hermano, el es el único al cual puedo ver antes de mi boda, desearía poder ver a mamá pero no me está permitido al menos hasta unos días antes de la boda aunque agradezco qué mi hermano pueda estar aquí - estaba pensando las cosas.

Sabes que te vas a casar sin importar que - lo sabía pero hubiera deseado que fuera una vil mentira y ser un Omega libre en vez de solo ser un Omega pobre que tiene que casarse con un alfa rico para dar sustento a su familia - oye no te preocupes tal vez con el tiempo el te gustará - no creo que eso vaya a suceder y menos ahora que he visto al alfa que por siempre me gustará.

Eres el indicado (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora