La Cabaña | XXVIII

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Ahora que pasaron dos meses y medio y estaban a una semana de Halloween o la noche de brujas, el príncipe ya podía salir con libertad ya que la gente se olvidó del problema.
Hubiera durado menos si no fuera por Hyo-Seo y por la pequeña "ayuda" de Taehyung. Pero todo se solucionó y podía decir orgulloso que no recibió ayuda de la reina para ello.
Era un sábado y como todo sábado tocaba reunión en el refugio y clases de magia, por lo que con su bicicleta fue pedaleando hasta el callejón cerca a su escuela.
La adrenalina de pedalear mientras bajaba una colina era increíble, el viento golpeaba su cara de manera suave y desordenaba su cabello.

–¡Min-Min!

No le hizo caso al principio, luego reaccionó al llamado. Y solo había una persona que lo llamaba así.
Retrocedió colina arriba buscando de dónde vino la voz y fue grande su sorpresa al encontrarse a tres de sus amigos parados en la calle como si fueran vagabundos.

–Hola...¿qué hacen aquí?

–Oye, también salimos–respondió Seung-Hye–No mucho, pero para hacer compras o divertirnos.

–¿Y esas maletas?

Seung-Hye, Seok-Hye y Seo-Yeon tenían cada uno una mochila o maletas en la que se supone que habían cosas. Era algo extraño porque ellos tres vivían en el refugio...¿y dónde estaba la jefa?

–A Eun-Yeong le vino el celo–dijeron los tres a la vez–¡Yo voy a explicar!

–De uno en uno, porfavor–dijo divertido.

–Yo lo haré–su amigo peliazul dejó su mochila en manos del alfa que casi se cae por el peso–Cuando viene el celo de alguien, ese alguien tiene que saber más o menos cuando viene. Porque unos días antes tiene que irse a un hotel o algo así para no afectar al resto...bueno, específicamente a Seunggie.

–Soy alfa–hizo "conejos" con su mano–A excepción de Seo-Yeon y la pequeña Chul-Moo, todos omegas.

–El caso es que la jefa se olvidó de su celo porque estaba concentrada en la futura junta de refugios, la subirán al nivel tres y por eso le darán un libro de hechizos avanzado–esta vez habló Seo-Yeon–Es un gran logro y se lo merece, por eso debe de hacer un gran discurso.

Jimin subió al nivel dos algo rápido, recuerda que ese día hicieron fiesta pero nunca tuvo que estar en una reunión de refugios para dar un discurso.
Los únicos que hasta ahora eran nivel tres eran los dos mayores y podían hacer magia increíble gracias a ese libro de hechizos avanzado, también queria hacerlo algún día.

–El celo felizmente vino cuando Seunggie fue a comprar al supermercado, pude ir a avisarle que no podía entrar. Le avisamos a Chul-Moo que no venga en una semana, sacamos nuestras cosas para sobrevivir y aquí nos ves.

–¿Entonces no hay clases esta semana?

–Nop.

–¿Y a dónde van ustedes?

La cara de los chicos cambió a una de angustia, parecía que no tenían nada resuelto.

–Es fácil pagar un cuarto hotel para tí solo, pero somos tres y el dinero no es abundante. La jefa, Seunggie y Seo-Yeon trabajan, pero a Seo-Yeon le pagan menos por ser menor–bajó la cabeza–Me gustaría trabajar también pero no me dejan porque debo estudiar.

–Y es que no puedes hacer dos cosas a la vez–el alfa pelinegro dejó su maleta y la mochila que tenía a la pobre beta que casi se cae por lo pesado que era–Prefiero que estudies y disfrutes hasta que crezcas, trabajar es complicado.

–¡Ayuda!–chilló la peligris, pero nadie  le hizo caso.

–¡Pero me siento un mantenido! También quiero dinero para ayudar y conseguir cosas que deseo.

¡Maldición!, soy omega  |  Yoonmin/SujimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora