¡Maldición!, soy omega | Yoonmin/Sujim

Un Cambio De Imagen | XXXI

Cuando Yoongi llegó a su salón, no esperaba que Jin lo abandonara por un momento para estar con el omega del incidente.
Y es que Jin era su único amigo ahí, realmente no tenía mucho tiempo libre gracias a sus prácticas y entrenamientos diarios. El poco tiempo que tenía prefería mil veces pasarlo junto a su amado omega (el cual no pudo ver en la mañana hoy) y en caso de que no pueda, dormir un poco.
Hoy sería un largo día, de hecho. Ayer, lunes, no hubo clases ya que vinieron del extranjero unos fotógrafos para tomarle fotografías a su escuela y ponerlas en una revista estadounidense. Por lo que escuchó, todo el Palacio estaba en la mira del mundo desde que la reina Eun-Ji II gobernaba una de las tres ciudades más ricas del mundo.
En consecuencia, harían las tareas de ayer y hoy. También las clases y los entrenamientos...hoy tendría que quedarse unas horas más en la tarde.

–¡Yoongi!

Alguien lo llamaba, era raro.
Miró hacia su asiento por instinto, encontrándose con una omega de cabello....¿Semi-lacio?
Así es, Hyo-Seo no tenía hoy sus particulares risos. En su lugar, su cabello caía con gracia por su espalda.

–¿Hyo?

–H-hola–nerviosa, se acomodó el cabello entre los hombros–¿Qué tal?

–Bien, ahí–se sentó al lado y miró su cabello de nuevo–¿Y ese cambio?

–¡A-ah!–miró abajo, aún más nerviosa que antes–Creí que sería bueno un cambio de look de vez en cuando...

Amaba su cabello rizado, pero en el poco tiempo que había estado viendo al alfa azabache desde lejos con sus amigos había notado algo raro.
No había día en el que no tocara el cabello semi ondulado del príncipe, jugaba con él, lo veía, lo removía o acomodaba...incluso posaba su cara en él. Parecía gustarle mucho los cabellos rubios semi ondulados, sería la única explicación no rara para eso.
Durante todo el último fin de semana, iba a peluquerías para alizarse el cabello. Su melena era tan rizada que no podía ser ondulada, o no duraría mucho. Así que bueno, lo más cercando al cabello del príncipe Park sería aplanar el suyo.
Un poco tonto, pero sus amigas le insistieron en que ese cambio haría caer a su crush.

–Se te ve bien–animó, sacó sus libros para esa clase y los puso encima de la mesa–Está bonito.

Dentro suyo, Hyo-Seo sintió que iba a explotar de la emoción. Ya está, a partir de ahora tendría el cabello así.
Y Yoongi...él seguía pensando que el cambio de imagen de su amiga era bueno, pero no terminaba de acostumbrarse a él y prefería los desordenados y comunes risos de antes.

{👑🚫}

–Whoa...la verdad sí creo que te has pasado un poco.

–¿Por qué? Creo que es una muy buena manera de mostrarle a esa chica que nadie me iguala–dijo con cierto egocentrismo.

Ayer en la noche fue a pasear mientras volvía a su casa, había estado en la de su alfa hasta que su padre lo llamó para que fuera a cenar.
Y cerca de la peluquería, había visto a "Risitos de oro" mirándose al espejo complacida. Decidió acercarse un poco, no le interesaba la chica pero le daba curiosidad.
Y prácticamente escuchó todas las tontería que le aconsejaban sus amigas desde los sofás. O eran malas amigas, o no sabían de lo que hablaban. Obviamente cambiar de estilo no haría que "la presa", como lo nombraron ellas, caiga. Solo haría que se interesara en el cambio repentino, más no en sus posibles sentimientos...y a pesar de que no dijeron nombres, creía que hablaban de su novio.
La misma Hyo-Seo dijo que ahora su cabello se parecía al suyo y que era mucho más lindo, cosa que lo molestó. Su cabello era natural, pero le daba tanto orgullo lo bonito que era como para permitir que alguien más lo compare con desprecio.
Para él no era necesario ir a una peluquería, los peluqueros podían ir a su casa cuando quisiera. Se levantó una hora más antes de lo normal para que estos conviertan su cabello de semi ondulado a rizado.
La mejor manera de demostrar quién manda, era jugando como ella.