Palacio Real | II

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-Atención pasajeros, estamos por llegar a la estación real. Todavía no saquen sus maletas, ya que podría dañar a los demás pasajeros en la marcha. Se agradece su comprensión.

La verdad nadie había escuchado eso, la mayoría de los que viajaban eran niños entre 9 a 15 años con unos cuantos adultos. No olvidemos a la familia Min y Namjoon, quienes dormían unidos como nutrias. Namjoon se acurrucaba por las piernas de Hoseok que abrazaba de la cintura a Suk-Ja, ella escondía su cabeza en el cuello de Yoongi, que agarraba la mano de su madre y ella estaba encima de su esposo quien tenía su mano en el hombro del pelimorado.
Este al ser un tren real, tenía vagones que parecían dormitorios pequeños con cama y todo.

-Atención pasajeros, llegamos a la estación real del palacio. Pueden sacar sus maletas. Esperamos que su estancia aquí haya sido lo más cómoda posible, un gran saludo de parte de sus amigos de '¡Beep Beep!'.

Aún con todo el alboroto de los otros vagones ninguno despertaba, aferrándose más al que tenía cerca como si tuvieran miedo de separarse.
No hasta que tocaron la puerta para avisarles que habían llegado a la estación.
Yoongi abrió los ojos, adormilado, se paró e intentó desarrugar su camisa. Las primeras impresiones son importantes.

-¡Despierten!-gritó asustando al pobre Hoseok, que se levantó de un brinco.

-¡Gi!-el susto había sido tan fuerte que se le aguaron los ojos.

-Perdón por asustarte, pero ayudame a levantar a todos.

Y así comenzaron a despertar a todos, mientras el azabache movía a los adultos Hoseok se agachaba y hacía cosquillas en los niños. Hacía lo que podía ya que sus desordenados y pelirrojos cabellos le impedían ver.

-Nam hyung, despierta-con Sukkie despierta hacían cosquillas por todos lados; pies, axilas, cuello, espalda pero no funcionaba.

-¿Qué hacen? Namjoon no tiene cosquillas ahí–Myeong-Suk se acercó a su cara y tocó sus orejas, haciendo cosquillas.

Poco a poco iba despertando y risas se escapaban de su boca, se retorciía y daba patadas a lo salvaje.

-¡P-pare!.

-Está bien, solo porque debemos de irnos.

-Bienvenidos a su nuevo hogar, aquí están las llaves-la empleada con su traje característico les dió a cada grupo de niños unas llaves que parecen de oro-También les entrego un mapa que no se pierdan

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-Bienvenidos a su nuevo hogar, aquí están las llaves-la empleada con su traje característico les dió a cada grupo de niños unas llaves que parecen de oro-También les entrego un mapa que no se pierdan.

Se retiró y los niños junto a sus adultos encargados fueron a sus habitaciones, excepto nuestra familia que tenía apartada una casa.

¡Maldición!, soy omega  |  Yoonmin/SujimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora