¡Maldición!, soy omega | Yoonmin/Sujim

Celos, Ese Problema | XXXV

-¿Qué haces aquí?-preguntó amenazante.

Pero el que preguntó no fue Jimin, el que preguntó fue Yoongi. Su lobo en ese momento estaba en "estado de paz" junto a su omega y pronto pasaría a "estado natural"...sí, esa era la mejor manera de decirlo.
Pero ahora mismo a su lobo le daban unas ganas tremendas de quitarse a esa chica de encima y disfrutar de la cercanía a solas con su omega.

-Vine a buscarte~

-Hyung-

-¿Estabas aquí?-por fin, Hyo-Seo miró al príncipe con fingido asombro-No te noté, tal vez tu disfraz es tan mediocre que pasas desapercibido.

Ya se había olvidado de la tregua que tenían, así que en sus planes estaba soltar muchas maldades. Todavía quería entender por qué rayos ambos estaban tomados de las manos y querían ir a un lugar, o por qué el alfa que le gustaba le dio sus chocolates a su amigo.
Pero...lo que menos entendía es sus disfraces. Era un poco tonta y no sabía de qué iban ambos, pero no era tan tonta como para no saber que hacían juego. Ambos del mismo color y estilo, con la diferencia de que un traje es más formal y el otro más coqueto.
Aunque nada debería preocuparle, ella estaba con él.

-Bueno, si el mío es mediocre el tuyo...ugh.

Y eso le molestaba, pero hasta ella pensaba que su disfraz era hermoso. Demasiado hermoso, el maldito incluso estaba más lindo que nunca.
Comenzando por su sutil maquillaje y su cabello con un pequeño detalle, que parecía habérselo alisado un poquito. Y luego estaba su disfraz y como este le ayudaba a verse más delgado y resaltaba algunas partes como las mangas y sus detalles.
Se veía también muy coqueto, pero para nada como un alfa...no sabía qué era su disfraz, pero estaba pensando en que eso era para omega...pero a pesar de eso, resaltaba también partes que le hacían ver más...
No iba a pensar de más, porque seguiría alagando al chico sin querer.

-Yoongi, vamos a bailar-tomó del brazo al azabache con la intención de llevárselo.

-¿Hyung?-preguntó de nuevo, pero ahora con un tono más molesto-¿Por qué no apartas a Risitos de oro y nos vamos de aquí?

-Verás-se abrazó a él-Nosotros venímos a esta fiesta juntos.

Por un largo rato nadie dijo nada, ni siquiera el propio alfa porque ya tenía miedo de la reacción del príncipe. Sabía que tenía que aclarar las cosas, pero igual tenía tanto miedo como para hacerlo.
Entonces, con el mismo abanico de madera fue golpeado. Jimin lo agarró y golpeó con él su cabeza, no con violencia...más bien, con reproche.

-¡A-agh!-se llevó las manos a la cabeza y lo miró-Escucha-

-Idiota.

No dijo nada más que eso, cosa que agradecía pues con una sola palabra le había dañado más que con el golpe.
No solo él se sintió miserable, su alfa también porque sintieron que sin querer, le fallaron a su omega. La mirada de enojo que le daba...sentía que lo iba a matar.

-Deberías quedarte con tu amiguita, prefiero no estorbar su cita e irme.

-Escúchame, no es lo que crees...

-¿Ah no? "Amigo mío"-posó su mano en su hombro-Yo hubiera escogido a otra chica porque esta está loca, pero supongo que felicidades.

-Tengo unas amigas, tal vez puedan hacerte compañía-dijo, mientras agitaba su mano en despedida.

-No gracias, seguro son igual que tú-puso la mayor cara de desagrado que puso en la vida.

-Principito, ya no tienes nada que hacer aquí. Te haz colado a la fiesta, no es muy bueno para tu imagen. Adiós~