🅞︎🅝︎🅔︎ 🅢︎🅗︎🅞︎🅣︎🅢︎ [𝐒𝐚𝐥𝐥𝐲 𝐅𝐚𝐜𝐞]

✩01✩

AU moderno

Veía el edificio que estaba al frente suyo, la fachada como la puerta de entrada se veían descuidadas, siempre le a causado algo de miedo aquel edificio. A veces sentía que en algún momento una de las ventanas estarían llenas de sangre o se vería a alguien con una tenebrosa cara. Sacudió su cabeza para alejar esas ideas, acomodó su gorro y decidió ingresar al edificio.

Vio el pasillo con desconfianza, rezando le a su dios que perdone lo que está haciendo, después de todo, mentir le a tu progenitor a que te ibas a quedar en una casa de un chico de la iglesia y hasta te ibas a quedar a dormir para hacer un amigo "digno" no era nada bueno, menos con el tipo de padre que tiene.

Saco su teléfono, desbloqueando lo con su huella viendo ese chat, dando le las indicaciones de como encontrar el departamento de la persona que envió esos mensajes. Suspiro, dio inicio a su caminar hasta llegar al elevador, al ingresar dentro solo presionó el botón que daba al cuarto piso. Al ya estar en el piso, camino hasta el pasillo, viendo a cual de los departamentos era al que tenía que ir, cuando vio la puerta con el número "402" tembló y sudó frío. Veía el chat que estaba en su teléfono y luego a la puerta, no se podía acobardar, sería tan patético. Después de todo, solo esta visitando a su novio.

❥︎𝐓𝐨𝐧𝐭𝐢𝐭𝐨★

𝐇𝐞𝐲, 𝐲𝐚 𝐞𝐬𝐭𝐨𝐲 𝐚𝐟𝐮𝐞𝐫𝐚

𝐀𝐟𝐮𝐞𝐫𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐞𝐝𝐢𝐟𝐢𝐜𝐢𝐨 𝐨 𝐚𝐩𝐚𝐫𝐭𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨?

𝐀𝐩𝐚𝐫𝐭𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨, 𝐩𝐨𝐫𝐟𝐚 𝐲𝐚 𝐚𝐛𝐫𝐞𝐦𝐞
𝐍𝐨 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐦𝐞 𝐯𝐞𝐚𝐧 𝐭𝐮𝐬 𝐯𝐞𝐜𝐢𝐧𝐨𝐬

𝐂𝐫𝐞𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐯𝐚 𝐚 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐫 𝐝𝐢𝐟𝐢𝐜𝐢𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨 𝐭𝐞 𝐯𝐞𝐚𝐧...

?

Escucho la puerta del apartamento abrirse, guardo su teléfono en su bolsillo trasero, listo para recibir el gran abrazo de su novio, pero no recibió nada. Levanto la mirada viendo al señor Fisher, el padre de su novio. Sonrio tímido, levanto su mano para saludarlo, el hombre solo saludo con la cabeza, haciendo se aún lado de la entrada para dejarlo pasar. Paso con cuidado al departamento, viendo como su novio apenas salía de el pasillo que daba a los cuartos con su camisa mal puesta, unos jeans de mezclilla rotos y con su pelo azul despeinado. Lo primero que iba a ser era abalanzarse sobre su novio para abrazarlo y llenarlo de besos, pero, esa idea cambio cuando vio quien estaba a su lado.

Veía como su padre estaba a lado de su pareja, su chico estaba con la mirada cargada de miedo y se veía tenso, pero debía admitir que ese gorro negro que llevaba se le veía bien, al igual que su ropa que era del color antes mencionado.

—Sally, no me avisaste que hoy tendrías visitas— El señor Fisher miraba atento al rubio que estaba a su derecha, viéndolo de arriba y abajo, su mirada se dirigió a la mochila que colgaba del hombro derecho del muchaco—Bueno papá, ¿que mi novio no me puede visitar?—

Esas simples palabras hicieron que los colores se le subieran a Travis, aún le avergonzaba el echo de que el padre de su novio, supiera oficialmente que su pequeño hijo, ya tenía alguien quien le robara los suspiros. Al hombre no le molesto que su hijo fuera bisexual, lo acepto totalmente desde que se lo confesó, tampoco le molestó que saliera con un hombre, su malestar era que con el chico que sale su único hijo, era quien alguna vez le puso la mano encima. Pero parece que todas las veces que Sal llegaba a la casa con su ropa rota y desaliñada quedaron en el pasado, pero tiempo después, cuando Sally vio que si no le contaba el por qué antes Travis actuaba así, no lo dejaría tenerlo como pareja, asi que con el consentimiento de Travis, le dijo parte de todo lo que le pasó y sigue pasando am rubio. Henry Fisher comprendió, y de alguna manera le dio un apoyo enorme al muchacho. Claro, que el comportamiento sobreprotector hacia su hijo no se le iba a quitar, a veces tratando a Travis como si fuera un delincuente que quisiera robarse a Sally, pero quien lo podía culpar, ese pequeño peliazul era su única familia.