"Cariño, te arruinaré si me dejas quedarme."
Eleanor Snape ama a Ron Weasley,
es su mayor secreto.
Pero con los ojos de todos en ellos
es inevitable que se cometan errores.
Probablemente ella no le estaba haciendo mucho bien
de todos modos.
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Unos días después, esperé pacientemente en el andén con mi padre para que llegue mi mejor amiga, Faye Bluebell. Ella era una Slytherin como yo, y mi padre la amaba como a otra hija. Nos hicimos amigas cuando nos ubicaron en el mismo dormitorio nuestro primer año, y desde entonces ella ha sido mi persona favorita.
—Hola extraños.- dijo, apareciendo detrás de nosotros con la mayor sonrisa en su rostro.
—Faye querida, que bueno verte.- Dijo mi padre, dándole un breve abrazo. Su voz era sin emociones, pero me di cuenta de que estaba feliz de verme pasar el tiempo con ella y no con los demás.
—Es bueno verlo a usted también señor, ¿estará enseñando este año?- Ella preguntó formalmente como siempre lo hacía a su alrededor.
—De hecho lo haré, así que no espero nada más que excelentes calificaciones.- Respondió con una pequeña sonrisa.
Por el rabillo del ojo, vi a Ron subir al tren con Harry, y sentí una repentina oleada de emoción.
—Bueno, deberíamos irnos papá, te veré allí.- dije, arrastrándome de puntillas para besarlo en la mejilla.
—Muy bien, estén a salvo ustedes dos.- Nos atrajo para otro abrazo dejándonos ir.
—¿Emocionada de ver a tu pequeño novio?- Preguntó Faye una vez que estuvimos fuera de su rango de audición, dándome un codazo en el costado.
—Lo vi hace unos días.- Le di un guiño y se rió.
—Ustedes dos son tan lindos. Ojalá pudiera ser hombre y decirle a mi enamorada que me gusta, pero por supuesto, eres mucho más valiente que yo.- Dijo ella, suspirando.
—¿Llego a saber quién es ahora?- pregunté.
Faye ha tenido el mismo enamoramiento durante 2 años y siempre se ha negado a darme un nombre.
—Ya te dije amor, descubrirás quién es ella si todo sale bien. No puedo maldecir ese tipo de cosas.- Envolvió un brazo alrededor de mis hombros mientras nos dirigíamos al tren.
—Bueno, estoy segura de que lo hará. Tú y una chica bonita de la mano serán lo mejor que Hogwart's haya visto en su vida, lo sé- dije.
—Hablando de chicas bonitas, ¿dónde está Luna?- Preguntó Faye, mirando a su alrededor buscando a nuestra pequeña amiga rubia.
—Hola.- Luna estaba detrás de nosotros, mirando al vacío como de costumbre.
—Hola preciosa.- Faye besó su mejilla y Luna sonrió.
—¿Quieren copias de El Quisquilloso?- Preguntó, sacando una pila de periódicos.
—Por supuesto.- dije, tomando uno de sus manos.
—El negocio está mejorando bastante en estos días, a mi papá le encanta.- le entregó una copia a Faye también.
—¿Cómo está tu papá? No lo he visto desde el comienzo de la verano.- Le preguntó a Luna mientras tomábamos nuestros asientos.
