Ruin you -Ron Weasley ✓

•10•

Los cinco nos paramos en la torre de astronomía al día siguiente; Yo, Harry, Ron, Hermione y Faye sentados en la comodidad de otro silencio.

El cielo estaba cubierto de nubes de color gris oscuro, cubriéndonos de tristeza mientras llegamos a un acuerdo con la vida que estaríamos viviendo a partir de este momento.

—¿Crees que lo hubiera hecho? Draco, quiero decir.— Hermione preguntó de repente.

—No.— respondí.

—Estaba bajando su varita. Al final, era Severus. Siempre era Severus.

Ron envolvió su brazo alrededor de mis hombros y me apretó herméticamente.

Hermione me miró con compasión y luego recogió el relicario. Harry lo había sacado del patio y lo había examinado.— Nunca me dijiste qué era un Horrocrux.— le dije, tomando también un el collar grande.

—Son pedazos del alma de Voldemort. Solo puedes crear Horrocruxes si has asesinado a alguien, que es el acto más real de maldad. Si los encontramos y destruimos a todos, él ya no será inmortal y podremos derrotarlo de una vez por todas.— respondió Harry, mirando por encima de las murallas en la distancia.

—Bueno, entonces ya lo estás haciendo bien si tienes este. ¿Lo abriste?— le pregunté.

Harry se giró y suavemente le quitó el collar a Hermione.— Bueno, hazlo.— dijo Faye.

Harry contuvo el aliento mientras abría el medallón lentamente.

"Para el Señor Oscuro. Sé que estaré muerto mucho antes de que leas esto, pero quiero que sepas que fui yo quien descubrió tu secreto. He robado el Horrocrux real y tengo la intención de destruirlo tan pronto como pueda enfrentarse a la muerte con la esperanza de que cuando encuentre su pareja, será mortal una vez más. R.A.B. "

Habló; Una voz que nadie en la habitación pareció reconocer.

—¿R-A-B?— Preguntó Hermione, una mirada confusa se extendió por su rostro.

—Ni idea.— respondió Harry.

—Pero sean quienes sean, tienen el Horrocrux real, lo que significa que fue un desperdicio. Todo eso.

Se guardó el collar en el bolsillo de la bata y suspiró, volviéndose hacia las murallas una vez más.

—Bueno.— comencé, alejándome de Ron y tomando la mano de Harry.

—Eso solo significa que tendrás que encontrar el verdadero.— Me miró y luego se centró en Ron.

—Ahora no, Harry, todos podemos hablar de esto más tarde.— respondió Ron nervioso.— Hasta entonces, me gustaría llevar a Elle a caminar. ¿Están bien aquí?

—Estamos bien Ron, gracias.— Hermione tiró de él para darle un abrazo y sentí una punzada familiar en mi pecho.

Le ofrecí a Harry una última sonrisa reconfortante antes de seguir a Ron bajando los escalones de la torre.

—¿Por qué llamaste a mi puerta anoche?— Pregunté, rompiendo el silencio cuando finalmente llegamos al fondo.

Ron se quedó callado por un momento, jugueteando con sus propios dedos y negándose a mirar hacia arriba.

Murmuró algo inaudible en voz baja y me quedé mirándole con molestia.— Usa tus palabras, Weasley.

—¡Te extrañé, está bien!— Levantó un poco la voz y alzó las manos en el aire.

Ahora era mi turno de quedarme callada, sin saber qué decirle.— Sé que es extremadamente injusto, considerando lo que hice, pero la verdad es que hay muchas cosas que no sabes, y estaba cansado de mantenerte en la oscuridad. Quería hablar, pero luego dijiste el nombre de Harry y me puse celoso de pensar en él viniendo a tu dormitorio tan tarde en la noche, así que yo era solo un idiota. Es una excusa terrible en realidad, pero es todo lo que tengo.— explicó.