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—De todas las personas del mundo no esperaba encontrarte a tí—esbozó una linda sonrisa mostrando sus dientes delanteros

—Creeme que digo lo mismo, pero, adelante—lo invito a sentarse en la silla del frente, se quita el abrigo gris que trae puesto y lo pone en el respaldo para después acomodarse

—Me alegra volverte a ver, aquel día no te pedí tu número y no creí conveniente ir a buscarte

—Yo me sentía un poco preocupada, esperaba que no te fueras a lastimar más o regresaras a buscar problemas—rie ante mi comentario y niega con la cabeza

—No lo volvería a hacer, pero mejor cuéntame qué haces aquí—termina su oración y justo en ese momento llega el mesero con mi jugo en la mano, lo pone sobre la mesa y pregunta si gustamos algo más

—¿Quieres uno igual?—pregunto espectante a Jungkook que pareciera acaba de escuchar una amenaza de muerte

—N-no—agita las manos frente a nosotros declinando la propuesta—acabo de lavarme los dientes—se inclina hacia el mesero y éste se retira

—¿Te lavaste los dientes a esta hora?—pregunto con la pajita de mi jugo en la mano bebiendo de ésta enseguida, sabe realmente bueno

—Nunca hay horario para mantener los dientes blancos

—Tienes razón Jeon—sigo bebiendo de mi jugo como si la vida se me fuera en ello, pero Jungkook me observa detenidamente como si tuviera algo raro—¿Tengo algo en la cara?—paso mis manos sobre mi rostro esperando encontrar algo inusual

—No es eso, solamente me quedé pensando en unas cosas—asiento en respuesta a su comentario—sigues sin decirme qué haces en éste hotel—coloca los codos sobre la mesa recargando su mandíbula en sus palmas

—Bueno pues es que yo...—el sonido de mi teléfono interrumpe la conversación, lo sacó del bolso de mi pantalón y en la pantalla aparece el nombre de asistente Gates—dame un segundo

Señorita Seo, la propuesta que me pidió está lista, el señor Burell me comentó sobre el cronograma de mañana y si así lo desea, me puedo quedar a ayudarla, lo digo porque son las once de la noche y mi turno acabó—se escuchó un bostezo del otro lado de la linea

—Ve a descansar, ya hiciste mucho por mí. Envíame la propuesta a mi correo y ahora lo checo, descansa Lili—doy por finalizada la llamada—Jeon, en verdad lo siento pero justo ahora tengo pendientes que hacer

—No hay ningún problema señorita Seo—me guiña un ojo de forma divertida, se levanta de la silla para despedirse de mí mientras los dos hacemos reverencia, bastante gracioso por cierto, me alejo rápidamente porque si no me apresuro a trabajar será muy probable que ni siquiera llegué a dormir a casa.
Si soy sincera me dió mucho gusto ver a Jungkook, es como si estuviera esperando que el destino lo pusiera frente a mí nuevamente, ni siquiera lo puedo explicar, el sentimiento que me provoca tenerlo frente a frente, sonriendo como sólo el sabe, maldigo el no poder quedarme a platicar cómodamente con él.

[Jungkook]

Cuando Yerim se aleja logro divisar a Nam que viene hacia mí un poco agitado, como si hubiera estado corriendo, con la respiración entrecortada. Me sorprende cuando se para y me mira de una manera....misteriosa

—¿Pasa algo hyung?

—Bang PD te está buscando—se coloca su mano en el pecho intentando respirar mejor

—Pues entonces voy a verlo—volteo para agarrar mi abrigo e irme pero Nam me toma por el brazo deteniéndome—¿Qué pasa?—frunzo el ceño un poco desconcertado

Jamais Vu - Jeon JungKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora